Estados Unidos

¿Trabajar en domingo, día del Señor?

¿Es lícito que los empleadores obliguen a trabajar a los empleados en los días dedicados al culto religioso? La cuestión está ahora en manos del Tribunal Supremo de Estados Unidos tras las reclamaciones de Gerald Groff, un cristiano evangélico.

Gonzalo Meza·3 de junio de 2023·Tiempo de lectura: 3 minutos
Trabajo

(Unsplash / Marten Bjork)

¿Dedicar el domingo al trabajo o a Dios? Para Gerald Groff, un cristiano evangélico de Pennsylvania, que trabajó como cartero rural, la respuesta es clara: «El domingo es un día en el que nos congregamos como creyentes. Honramos el Día del Señor» y no es posible dedicar ese día al trabajo.

Dicha afirmación le valió amonestaciones y advertencias de despido por absentismo de su empleador: la Oficina de Correos de los Estados Unidos (USPS, por sus siglas en inglés). Antes de que lo despidieran, Groff renunció pero demandó a USPS por «discriminación religiosa» bajo el Título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964 y un fallo del Tribunal Supremo de 1977 conocido como «Trans World Airlines, Inc. v. Hardison».

Su caso no prosperó ni en una Corte de Distrito de Pennsylvania ni en su Corte de Apelaciones.  Ahora, el caso está siendo discutido en el Tribunal Supremo de Justicia, el cual deberá decidir una cuestión fundamental que podría afectar a las leyes laborales de EUA: si un empleador debe hacer concesiones para que un empleado pueda ejercer sus prácticas religiosas, aun cuando esto afecte a la empresa y a los otros empleados. El caso es conocido como «Groff v. DeJoy», pues la demanda la realiza Groff contra el director general de USPS, Louis DeJoy.

El empleo

Gerald Groff creció en el condado de Lancaster, Pennsylvania. De niño acudió a escuelas administradas por los Menonitas. Vivía frente a la granja de sus abuelos. Por ello cuando su abuelo murió, Groff se acercó tanto a Dios que decidió participar en misiones evangélicas cristianas en varias partes del mundo. A su regreso a los EUA tuvo varios empleos hasta que inició a trabajar en el 2012 en USPS como cartero rural.

Groff sabía que probablemente tuviera que trabajar los fines de semana, pues la entrega de correos no se detiene. Durante algún tiempo, Groff obtuvo concesiones para no trabajar el domingo y suplir dicha jornada en otros días. Sin embargo, en el 2013 el gigante corporativo Amazon firmó un contrato con USPS para la entrega de mercancía incluso los domingos. Durante algún tiempo la situación de Groff no cambió. No obstante, para evitar futuras complicaciones Groff se cambió a una sucursal de USPS con menor volumen de trabajo.

En su nueva sucursal los gerentes también buscaron formas para conceder la solicitud de Groff. Pero en el 2018 fue imposible hacerlo debido a la ausencia de empleados que pudieran cubrir turnos de trabajo los domingos. Por ende, se le notificó a Groff que tenía que acudir a su empleo el domingo. Como ya lo había hecho varias veces, Groff informó a su director de sucursal que no lo haría debido a sus creencias religiosas. Su respuesta le valió notificaciones de posibles medidas disciplinarias por absentismo laboral e incluso la terminación de su contrato. Antes de que eso ocurriera Groff renunció, pero presentó una demanda ante un Tribunal de Distrito de Pennsylvania.

Bases legales

Las bases de dicha demanda fueron varias leyes, entre ellas, el Título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964 y un fallo del Tribunal Supremo de EUA de 1977 conocido como «Trans World Airlines, Inc. v. Hardison». La primera prohíbe a un empleador discriminar a un individuo a causa de su religión (definida como «todos los aspectos de la práctica y la observancia religiosa, así como las creencias»). Cuando el trabajador solicita a su empleador concesiones razonables para ejercer su fe, este debe buscar formas para concederlas, a menos que estas impliquen dificultades excesivamente gravosas para el negocio. En ese rubro, el fallo «Trans World Airlines vs Hardison» de 1977 señala que dichas concesiones onerosas significan que al otorgarlas el empleador tiene que «asumir un costo mayor al mínimo» («de minimis cost»).

USPS y otros empleadores han señalado que este costo mayor al mínimo implica el surgimiento de problemas onerosos para el negocio y para los otros trabajadores. Cuando a un trabajador se le concede una licencia de este tipo, alguien debe trabajar en las horas y días de ausencia del empleado con permiso. Y cuando eso se suscita cada semana, se pueden crear tensiones de diverso tipo entre los otros empleados. En el caso «Groff v DeJoy» la negativa de presentarse a trabajarlos domingos creó, según USPS, una «atmósfera tensa y resentimiento» entre los trabajadores.

El Tribunal Supremo deberá decidir cuáles son los parámetros de costo mínimo que un empleador debe demostrar en caso de que se negase a hacer concesiones religiosas razonables a un empleado. No será un caso fácil pues el demandante solicita revertir o al menos revisar el fallo de 1977 «Trans World Airlines, Inc. v. Hardison». Se espera que el Tribunal emita una decisión en junio. Este fallo podría marcar las leyes laborales federales y el significado de los días sagrados no solo para los cristianos, sino para los judíos (el sábado) y musulmanes (viernes).

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