Parasceve: retrato de una Semana Santa
Pocas cartas de amor ha dado el cine español tan sentidas como la pieza que nos ocupa. Una oda de infinito cariño a las fiestas pascuales, a la Semana Santa, al Dios vivo, al Dios muerto, al Dios resucitado… al rito, al folclore, a la gente. Del Miércoles de Ceniza al Domingo de Ramos, y luego al de Pascua, todo en la ciudad de Sevilla. Así se nos presenta esta ariñosa postal.
Director joven con muchos tiros dados (cinco largometrajes, múltiples videoclips y series, y buen catálogo de premios locales), Hilario Abad se ha pasado los últimos diez años de su vida (2012-2021) viviendo la Semana Santa con su cámara para, como si fuera a modo de plegaria, crear una estampa viva de aquello que todos los años sucede en la ciudad hispalense: parasceve. Preparación.
Preparación en las tiendas. Preparación en los talleres, las fábricas, las casas y la calle. Parasceve es un retrato costumbrista cuasi impresionista, que transmite la emoción de lo retratado y los retratados, creando un algo intangible pero poderoso. No entra en argumentos, debates o discusiones. Solo nos tiende una mano y nos invita a acompañarle en esta experiencia.
Como mimo, tino, detalle y preciosismo, nos llega este documental a pie de calle, hecho con gusto y buen ritmo, dinámico pero contemplativo, que juega sus cartas con destreza a la hora de usar los silencios, los ruidos y la música, potenciando la esencia de las celebraciones pascuales tanto para la vista como el oído. Huye de la narración y la voz en off, para a veces salpicar el visionado, condimentarlo, con algún que otro comentario del público o retransmisión de los medios. Esto hace de la pieza una obra arriesgada, pero que no obstante sabe calar en el público y crear un ritmo propio, despertando y madurando verdaderas emociones en el espectador, a medida que vemos pasar, delante de nuestros ojos, los rótulos de los días en orden cronológico.
Para todo ello, Hilario ha contado con la ayuda de Francisco Javier Torres Simón, compositor paisano con el cual ha levantado un proyecto desde una maqueta de cartón en su casa -literal- hasta el largometraje que nos llega a las salas de toda España. Una gran aportación de cara a empezar la Cuaresma.