Según indican desde la Campaña de las Personas sin Hogar 2023, “en contra de lo que puede pensarse” el sinhogarismo es “una situación en la que puede acabar cualquier persona cuando se entrecruzan varios factores, el personal, laboral, familiar, económico…”. Aunque señala que suele darse este caso cuando se conjugan “la carencia de un lugar estable para vivir y la carencia o ruptura de vínculos sociales”.
En la rueda de prensa han participado Susana Martínez, presidenta de FACIAM, además de tres personas que han estado en situación de sin hogar: Manuel, español de 60 años, Estrella, hondureña de 19 años, y María, española de 34 años.
Manuel ha explicado que tuvo que dejar de trabajar con 40 años para cuidar a su madre enferma.
Cuando falleció y quiso volver a incorporarse al mercado laboral, ninguna empresa quería contratarle por considerarle “demasiado mayor”. Llegó un momento en que no pudo pagar el alquiler y, dado que se había producido una ruptura entre sus hermanos, tuvo que vivir en la calle, un mundo que “no conocía, lo veía como algo lejano que no podía pasarme a mí, no sabía ni que existían comedores sociales, ni ayudas, ni nada”.
Experiencias de sinhogarismo
Agotado de su situación, echó a andar por el arcén de la carretera en un día de verano, esperando que el excesivo calor acabase con él. Sin embargo, un imprevisto lo salvó: un joven enfermero estaba paseando a su perro cerca de la zona, el animal se escapó, fue hasta donde Manuel se encontraba tirado en el suelo y le lamió la cara. Siguiendo a su perro, el enfermero encontró a Manuel y pudo avisar al SAMUR.
Actualmente, Manuel, completamente recuperado, es atendido en el Centro CEDIA 24 Horas.
Estrella llegó de Honduras a España hace 10 meses. Aunque su padre conocía en Madrid a unos amigos, a los dos meses le dijeron que tenía que buscarse una habitación de alquiler. Tras pasar por el Albergue San Juan de Dios, ahora se encuentra en un piso de jóvenes, y se prepara para ser peluquera, porque su sueño es “poder traerme a mi padre y hermano”.
Por su parte, María, de 34 años, era artista grafitera, pero un accidente de tráfico y un embarazo inesperado la llevaron a una situación económica precaria. Sin lazos familiares, tuvo que pedir ayuda, a pesar de considerarse muy fuerte y no querer hacerlo, porque lo veía como algo de “gente pobre”. Durante este tiempo, afirma que se ha dado cuenta de que “sola no puedes”. Así, llegó al Hogar Santa Bárbara para madres solteras de Cáritas. María se define como “bastante atea”, y comenta que “nunca pensé dar gracias a la Iglesia, pero, la verdad, me ha salvado. Agradezco poder crear un vínculo con mi hija, y poder descansar, no había descansado en años”.
Promover «redes de apoyo»
La presidenta de FACIAM, Susana Hernández, afirma que “es necesario visibilizar el sinhogarismo como un problema social, que debe atajarse con políticas públicas y medidas que den apoyo social a las necesidades de las personas que no tienen un hogar”.
Por un lado, desde FACIAM buscan “garantizar el acceso a una vivienda. Ya que faltan viviendas sociales y los alquileres son excesivos”, y, por otro, “promover redes de apoyo”, sobre lo que indica la presidenta de FACIAM: “Reivindicamos el componente relacional como prioridad, tanto en la prevención de las situaciones de calle como en los procesos de recuperación e incorporación social”.
La Red propone “incorporar el apoyo social en los programas de intervención y conectar a las personas en espacios comunitarios”.
Visibilizar a las personas sin hogar
Esta campaña, que se celebrará el domingo 29 de octubre, supone la 31.ª edición de la Campaña de Personas sin Hogar, promovida por Cáritas, FACIAM (Federación de Asociaciones y Centros de Ayuda a Marginados), XaPSLL (Xarxa d’Atenciò a Persones Sense Llar de Barcelona) y besteBI (Plataforma por la Exclusión Residencial y a favor de las Personas Sin Hogar de Bilbao).
El jueves 26 se han celebrado actos previos a la campaña en diferentes ciudades. En Madrid se ha realizado una marcha desde Callao hasta Ópera, donde se ha leído el manifiesto de la campaña y ha tenido lugar una actuación musical en la que ha colaborado “Músicos por la salud”. Además, “de manera simbólica se ha tejido una red realizada por la artista textil Concha Ortigosa, y en cuya decoración han participado las personas de la red de atención a personas sin hogar de la ciudad de Madrid”, señalan en el comunicado de la campaña, “el objetivo es visibilizar a las personas que están en situación de sin hogar y reclamar derechos sociales que las protejan, como garantizar vivienda o promover lazos de apoyo”.