En la inauguración del XXV Congreso Católicos y Vida Pública, centrado en la evangelización e impulsado por la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) y la Fundación Universitaria San Pablo CEU, el nuncio de Su Santidad en España, Bernardito Auza, ha leído un mensaje del Papa a los participantes, en el que anima a “impulsar en la sociedad española, con conciencia cristiana y en coherencia con ella, los valores que anidan el orden temporal en el respeto a la dignidad y a los derechos de las personas, la búsqueda del bien común, el fomento de la libertad, la cordial convivencia, la solidaridad y la paz”.
El nuncio del Papa, Monseñor Bernardito Auza, ha manifestado que la presencia cristiana en la vida pública “no puede estancarse en el ámbito íntimo de la conciencia, en la sacristía, en el ámbito de la vida familiar” sino que “se extiende a la vida pública”, y ha definido el congreso como “un encuentro de raíces profundas, que reúne distintas sensibilidades de los católicos y nos ayuda a salir de la parálisis y la inercia, para actuar en la esfera pública”.
Mons Auza ha recordado asimismo que el término política procede del griego polis (pueblo) por lo que la participación en la política es “al servicio del bien común de toda la ciudadanía”. “El mensaje cristiano es una proposición no una imposición”, “evangelizar es la primera y principal tarea de la Iglesia”, y según el Papa, notas principales de esta evangelización son la misericordia, la Eucaristía y la sinodalidad”, ha añadido el nuncio.
En esta línea, de misericordia, el nuncio Auza ha recordado que cuando en una ocasión preguntaron al Papa cómo se definía a sí mismo, Francisco contestó: “soy un pecador”, y ha añadido que el lema papal es “Miserando atque eligendo”. El nuncio ha señalado asimismo que “el amor a la Eucaristía ha sido siempre la cumbre de la vida cristiana”, y que “en la Eucaristía, Jesús, nos da la vida”.
“Avivar la llama e implicarse”
Poco antes, el consiliario nacional de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) y arzobispo emérito de burgos, Fidel Herráez, ha reflexionado sobre “la identidad, la misión y el compromiso como acción” de los católicos, alentando a “implicarnos” en línea con la Exhortación Evangelii gaudium del Papa Francisco. Ahora se requiere “avivar la llama” y “salir con nuevo impulso a la plaza pública, a pesar de las dificultades de hoy y precisamente por ellas”.
El director del congreso, Rafael Sánchez Saus, explicó en la presentación que es un momento de encuentro “oportuno para echar la vista atrás y llevarlo hacia delante, elevar la mirada y hacerse nuevos propósitos”. Un punto de encuentro que, ha subrayado, “tiene el afán de proponer a la sociedad el valor y la potencia cristiana, cimentar la unidad y buscar las vías de proyección hacia el conjunto de la sociedad. Llevar la luz del Evangelio a todos los pliegues de la sociedad”.
Finalmente, para concluir la inauguración, el presidente de la ACdP y del CEU, Alfonso Bullón de Mendoza, ha realizado un breve repaso de las 25 ediciones del Congreso, que se ha podido llevar a cabo “gracias al compromiso y la dedicación de quienes lo han dirigido, a todos los que han intervenido en sus sesiones y a todos aquellos que, con su asistencia, le han dado sentido”.
La primera intervención fue una conferencia del presidente del Real Instituto Universitario CEU de Estudios Europeos, Jaime Mayor Oreja, quien el 5 de noviembre de 1999 impartió la primera ponencia del I Congreso Católicos y Vida Pública, cuando era ministro del Interior.
Apoyo de Europa y América a Tierra Santa
A continuación, expertos educativos analizaron los Congresos de Católicos y Vida Pública, llevados a cabo en Puerto Rico y Chile, moderados por la profesora María Solano, y por la tarde intervino el embajador de la Liga de Estados Árabes en España, el jordano Malek Twal, presentado por el profesor Antonio Alonso.
Malek Twal señaló que “los cristianos siempre han sido un componente integral de nuestras comunidades locales”, y así seguirá siendo en Tierra Santa, “a pesar de las dificultades actuales”, aunque ha señalado que su permanencia dependerá del apoyo que Europa y América les brinden a los cristianos y a sus hermanos musulmanes”.
El embajador de la Liga de Estados Árabes ha apelado a “una fuerte participación política de Occidente para resolver los problemas políticos, especialmente en la cuestión palestina, y también solidaridad económica para enfrentar los problemas de la pobreza, el
desempleo y la desnutrición”.
El congreso prosigue con distintas conferencias y talleres, y se clausura el domingo con la intervención de Magnus MacFarlane-Barrow, premio Princesa de Asturias a la Concordia 2023 y la lectura del Manifiesto.