Familia

La adopción como alternativa al aborto

En un mundo en el que los embarazos no deseados siguen suscitando profundos debates éticos, emocionales y políticos, la adopción ha surgido como una alternativa significativa para quienes buscan ofrecer un futuro viable a un niño.

Bryan Lawrence Gonsalves·8 de abril de 2025·Tiempo de lectura: 5 minutos
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(Unsplash / Natalya Zaritskaya)

Los recientes cambios de actitud de la sociedad, unidos a modificaciones legales en varias regiones, han puesto la adopción en el punto de mira de la opinión pública. En varios países, los responsables políticos están reevaluando las leyes de adopción, con el objetivo de agilizar procesos que, de otro modo, pueden resultar complejos y costosos. El caso más notable es el de Vietnam en 2025.

En un mundo en el que los embarazos no deseados siguen suscitando profundos debates éticos, emocionales y políticos, la adopción ha surgido como una alternativa significativa para quienes buscan ofrecer un futuro viable a un niño. Mientras que el aborto acaba con la vida de un feto en desarrollo, la adopción ofrece otra vía que, según muchos defensores y expertos, puede aportar esperanza tanto a las madres biológicas como a los niños y a las familias adoptivas.

Un salvavidas para los niños y las familias

La adopción se presenta a menudo como una alternativa de vida para niños que, de otro modo, nunca tendrían una oportunidad en la vida. Al optar por la adopción, las madres biológicas pueden asegurarse de que sus bebés lleguen al mundo en circunstancias que respeten el derecho fundamental de cada niño a ser cuidado y apreciado.

Los niños adoptados pueden beneficiarse de hogares estables, donde reciben apoyo emocional, oportunidades educativas y atención sanitaria esencial para alcanzar su pleno potencial. Todos los niños merecen la oportunidad de crecer y prosperar en un entorno afectuoso. La adopción lo hace posible, creando una base sólida para el desarrollo de los niños y ofreciendo al mismo tiempo tranquilidad a las madres biológicas.

El propio proceso de adopción está diseñado para dar prioridad al bienestar del niño. En la mayoría de los casos, los futuros padres adoptivos se someten a una rigurosa selección y evaluación para valorar si están preparados para proporcionar un hogar seguro y acogedor. Este planteamiento estructurado no sólo garantiza que los niños se coloquen en entornos propicios para un crecimiento sano, sino que también tranquiliza a las madres biológicas en el sentido de que su hijo estará bien cuidado.

El carácter meticuloso de las evaluaciones de la adopción, que van desde comprobaciones de la estabilidad financiera hasta evaluaciones del entorno familiar, añade una capa adicional de seguridad, ayudando a emparejar a los niños con familias que pueden ofrecer amor y apoyo a largo plazo.

La adopción proporciona paz

Cuando se enfrenta a un embarazo inesperado, una madre biológica puede sentirse abrumada y preocupada por su futuro, así como por ofrecer un futuro estable a su hijo; esta incertidumbre para ella y para su hijo puede llevarla a tomar la decisión de abortar. Sin embargo, al optar por la adopción, puede consolarse sabiendo que ha tomado una decisión amorosa y desinteresada por su hijo al darlo en adopción y, al hacerlo, le ha dado la experiencia de disfrutar de una vida maravillosa.

Además, la madre biológica puede elegir cómo llevar a cabo el proceso de adopción. Una adopción abierta permite cierto nivel de contacto entre la madre biológica, los padres adoptivos y el niño adoptado. Esto puede implicar el intercambio de fotos, cartas, llamadas telefónicas y videoconferencias. Al optar por el aborto, las madres pueden preguntarse para siempre qué vida podría haber tenido su hijo de no haber abortado. De ahí que una de las mayores ventajas de una adopción abierta frente a un aborto sea la posibilidad de conocer a su hijo y verle crecer y llevar una vida de éxito.

Otro tipo de método de adopción es la adopción cerrada, a veces conocida como adopción secreta. Este método protege la intimidad de ambas partes: la madre biológica y la familia adoptiva apenas saben nada la una de la otra. También significa que no habrá contacto con el niño tras el proceso de adopción. Mantener la adopción en secreto puede ser necesario en determinadas situaciones de maltrato para proteger a la posible madre biológica y a su bebé, al tiempo que se evitan problemas con parientes o familiares que no la apoyan.

La adopción es segura y proporciona alegría a los padres adoptivos

La infertilidad es una lucha silenciosa que afecta a millones de personas y parejas en todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre 48 millones de parejas y 186 millones de personas sufren infertilidad en todo el mundo, lo que la convierte en un importante problema de salud pública que trasciende las fronteras geográficas, sociales y económicas.

La incapacidad para concebir puede ser una experiencia emocionalmente abrumadora, que a menudo obliga a las parejas a navegar por un complejo panorama de tratamientos médicos, expectativas sociales y dolor personal. A medida que aumentan las tasas de infertilidad, también lo hace la necesidad de políticas de adopción y sistemas de apoyo progresistas.

Sin embargo, en medio de estos retos, la adopción emerge como una alternativa poderosa y de afirmación de la vida. Es sencillamente una opción realista para las familias que tienen dificultades para concebir un hijo, porque les permite hacer realidad su sueño de ser padres. Al abrir sus corazones y sus hogares a un niño cuya madre no podría mantenerlo, los padres adoptivos tienen la oportunidad de causar un impacto positivo y duradero en el mundo.

Para quienes sueñan con ser padres pero se enfrentan a obstáculos en la concepción natural, la adopción ofrece un modo profundo de construir una familia, no ligada por la biología, sino por el amor, el compromiso y el futuro compartido. Más allá de satisfacer los deseos de unos padres esperanzados, la adopción proporciona a los niños, muchos de los cuales pueden haber quedado huérfanos, abandonados o en régimen de cesión, la seguridad de un hogar acogedor y la promesa de un futuro mejor.

Protección jurídica

Más allá de las dimensiones emocionales y sociales, la adopción es fundamentalmente un proceso legal, que garantiza la transparencia, la responsabilidad ética y la protección de todas las partes implicadas. En esencia, la adopción transfiere los derechos y responsabilidades parentales de la madre biológica a la familia adoptiva, formalizando la relación de un modo que garantiza la estabilidad del niño a largo plazo.

Para las madres biológicas, la adopción ofrece salvaguardias legales que defienden sus derechos y su agencia en el proceso. En muchos países, las futuras madres tienen derecho a participar en la selección de una familia adoptiva, lo que garantiza que su hijo sea colocado en un hogar acorde con sus valores y deseos. Los marcos jurídicos también ofrecen a las madres biológicas un periodo estructurado de toma de decisiones, dándoles tiempo para hacer una elección informada y voluntaria sin presiones externas.

Para las familias adoptivas, el proceso legal garantiza legitimidad y seguridad. Proporciona unos derechos parentales claros, protegiéndoles de posibles disputas y afirmando su papel como tutores legales del niño. Las leyes de adopción también imponen directrices estrictas para evitar prácticas poco éticas, como la coacción o la explotación financiera, garantizando que las adopciones se lleven a cabo en el interés superior del niño.

En resumen, la adopción es una alternativa saludable al aborto. Ofrece a las madres biológicas la oportunidad de tomar una decisión positiva para su hijo no nacido, al tiempo que cuidan de su propio bienestar emocional y físico. Proporciona a las familias la oportunidad de convertirse en padres, ofrece protección legal a todas las partes implicadas y tiene un impacto positivo en la sociedad.

El autorBryan Lawrence Gonsalves

Fundador de “Catholicism Coffee”

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