Reconozco que me llama mucho la atención un mensajito que alguna cadena de televisión pone en alguno de sus programas: ‘Si sabe algo de algún famoso, escríbanos un WhatsApp’. Me impresiona la avidez que hay por conocer las intimidades y las aventuras de los personajes públicos. Y es todavía más llamativo que no se buscan, normalmente, actos ejemplares, sublimes o modélicos… la mayoría de las veces son intranscendentes o bastante pobres. Y nosotros, los cristianos, ¡tenemos una impresionante historia que contar! La de Dios, la historia de un Dios enamorado del hombre, que, por amor, envió a su Hijo unigénito para redimirnos y regalarnos el cielo! Y… ¡no lo contamos!
Por eso es bonito este lema que el Papa Francisco ha elegido para el DOMUND de este año: ‘¡Cuenta lo que has visto y oído! (cfr. Hechos 4, 20). Eso contestaron Pedro y Juan cuando se les prohíbe hablar de Jesús y eso es lo que los misioneros están hoy haciendo en todo el mundo: contando las maravillas del Señor. Y eso, sí, eso, es lo que el domingo del DOMUND de este año queremos recordar: que la Iglesia tiene una tarea impresionante de evangelización por delante y… ¡no podemos, no queremos, callar! Y para hacerlo posible, Dios, la Iglesia y la misión cuenta con todos: con los misioneros, con las personas consagradas, contigo y conmigo. Dios, la Iglesia y la misión necesita de tu oración, de tu fidelidad, de tu testimonio y de tu ayuda material, para que se pueda realizar….
Una tercera parte del mundo está catalogada como territorio de misión. Lo que significa que una tercera parte de este mundo nuestro no tiene medios personales, materiales, ni económicos para hacer posible la vida y la pastoral de la Iglesia. La oración, el valor de nuestras renuncias ofrecidas y nuestra colaboración económica hacen posible que esta vida no se apague, no se acabe. Nosotros podemos colaborar ¿no te parece?