«Inteligencia creativa, pasión por la comunicación y amor por la Iglesia». Estas fueron las palabras del difunto Alfonso Nieto, asturiano fallecido hace nueve años (2 de febrero de 2012) y uno de los impulsores del nacimiento de los estudios universitarios de periodismo en España y Europa, de las que se hizo eco el pasado 26 de febrero en el Aula Magna «Juan Pablo II» de la Universidad Pontificia de la Santa Cruz de Roma, al celebrar el 25 aniversario de la Facultad de Comunicación Institucional, de la que Nieto fue uno de los impulsores.
Se recordó al primer grupo de profesores, muy reducido, comenzando por el primer decano, Mons. Mariano Fazio, hoy Vicario Auxiliar del Opus Dei y Vicerrector de la Universidad Pontificia de la Santa Cruz. El sacerdote argentino también se refirió al fervor con el que el beato Álvaro del Portillo impulsó la creación de esta nueva realidad académica en el panorama de las universidades pontificias romanas, a pesar de que no fueron años fáciles, tanto desde el punto de vista organizativo como económico.
500 antiguos alumnos
En 1996 sólo había 9 estudiantes, la mayoría de ellos polacos, y hoy la Facultad puede contar con más de 500 antiguos alumnos que sirven a la Iglesia en prácticamente todo el mundo. Ellos fueron los protagonistas de un directo en streaming durante la tarde del 26 de febrero, en el que se escucharon sus testimonios: sirviendo en diversas instituciones eclesiásticas de varios continentes, desde Estados Unidos hasta Benín, Eslovaquia, India, Venezuela, Sudáfrica y Croacia.
Al servicio de la Iglesia y del Papa
Nuestro deseo -explicó el actual decano de la Facultad, Daniel Arasa, catalán afincado en Roma desde hace más de 20 años- ha sido siempre preparar profesionales capaces de adaptarse a las constantes innovaciones sociales en el campo de la comunicación, entendiendo inteligentemente los distintos avances que van apareciendo en escena.
«Desde hace un cuarto de siglo intentamos prestar un servicio a las iglesias locales, a la Iglesia universal y al Papa: desde San Juan Pablo II, con el que nació esta Facultad, y que nos animó a una nueva evangelización, pasando por Benedicto XVI, que tanto ha hecho por apoyar intelectualmente la comunicación de la fe, hasta el Papa Francisco, cuya llamada seguimos para vivir una Iglesia en salida.»
Actualmente hay más de un centenar de estudiantes matriculados en la Facultad de Comunicación Institucional en los tres ciclos de estudio que se ofrecen (Institucional, Licenciatura y Doctorado), entre los que se encuentran sacerdotes, religiosos y laicos procedentes de 38 países. Hay 12 profesores permanentes y unos 30 profesores colaboradores.
Una revista de acceso libre
Además de la docencia, a lo largo de los años, la Facultad ha dado un fuerte impulso a la investigación, en particular con la creación de la revista académica Church Communication and Culture, de acceso abierto, escrita en inglés y publicada por la editorial Taylor & Francis.
Webinar temáticos
Mientras tanto, el compromiso de la Facultad no se detiene y, de abril a mayo, ya está lista la serie de webinars temáticos relacionados con la 12ª edición del Seminario Profesional de Oficinas de Comunicación de la Iglesia, sobre un tema tan actual como la confianza institucional.
Mooc en tres idiomas
En mayo se lanzará el primer Mooc gratuito en tres idiomas que ofrece la Facultad, diseñado para un público no especializado y centrado en los temas específicos de la comunicación institucional de la Iglesia.
Acción de Gracias
En la misa de clausura de la jornada de celebración de los primeros veinticinco años de la Facultad, celebrada en la Basílica de San Apolinar y concelebrada por un nutrido grupo de estudiantes, profesores y sacerdotes, monseñor Mariano Fazio recordó en la homilía la jaculatoria que el beato Álvaro del Portillo solía repetir en cada aniversario: «Gracias, perdóname, ayúdame más», refiriéndose a todos personalmente y como miembros de la institución académica en diversas funciones.
A continuación, confió a la intercesión de Santa Catalina de Siena, patrona de la Facultad, el futuro de esta joven institución al servicio de la Iglesia universal y de toda la sociedad.