La Federación Internacional de Universidades Católicas (FIUC) ha elaborado, fruto de tres años de trabajo colaborativo, el Marco de Referencia de Newman. De este modo, se hace eco del creciente número de iniciativas en todo el mundo para promover la Responsabilidad Social de las Universidades (RSU). “Este documento tiene como objetivo concreto ayudar a nuestros miembros para iniciar un proceso de evaluación de sus prácticas en este campo”, indica François Mabille, secretario general de la IFCU.
En línea con la tradición de la Iglesia
Los rankings actuales, surgidos en los últimos años (Shanghai o Times Higher Education), califican a las universidades en un entorno cada vez más competitivo. Estas clasificaciones se basan principalmente en criterios científicos limitados y pasan por alto valores que son esenciales para las sociedades actuales. El Marco de Referencia de Newman pretende ser una referencia para promover la RSU. “Basándose en la dinámica que rige la educación superior hoy en día, [este Marco de Referencia] establece la necesidad de proponer alternativas viables que transmitan principios y valores que están en consonancia con la tradición humanista y católica de la Iglesia”, dice Montserrat Alom, Directora del Centro Internacional de Investigación y de Apoyo a la Decisión (CIRAD-FIUC).
De esta manera, el Marco de Referencia de Newman sitúa la noción de responsabilidad en el centro de la vida universitaria y de toda la comunidad. Este instrumento incluye unos 160 indicadores y veinte criterios clasificados en cuatro áreas diferentes: gobierno institucional, esfuerzos de protección del medio ambiente, prácticas de como el empleador implementa las “tres misiones”; y la coherencia general respecto a la identidad institucional.
El primero con inteligencia artificial
Además, para la elaboración del Marco de Referencia, han colaborado estrechamente con el ThinkTank Glob’experts-GMAP Center. Gracias a esta asociación, el Marco de Referencia de Newman es el primero de su tipo que se basa en el uso de la inteligencia artificial (IA) para ofrecer un sistema de evaluación dinámico y respetuoso con la diversidad de contextos en los que se encuentran las instituciones. El acceso a esta herramienta permitirá a las universidades adquirir un mejor conocimiento de sus logros en materia de RSU, al tiempo que dispondrán de datos fiables para redefinir sus estrategias de desarrollo institucional.
El hecho de dar visibilidad y cuantificar sus políticas y prácticas de Responsabilidad Social, permitirá a las universidades católicas promover y comunicar más fácilmente su singular valor añadido en el panorama de la educación superior.