El irlandés Cyril O’Regan y el japonés Etsurō Sotoo son los ganadores del Premio Ratzinger 2024. Ambos recibirán el galardón de manos del cardenal Pietro Parolin el 22 de noviembre en el Palacio Apostólico en la Ciudad del Vaticano.
Cyril O’Regan es un teólogo y profesor irlandés nacido en 1952. Su labor académica se centra especialmente en la Teología Sistemática y en la Historia del Cristianismo. Entre sus obras destacan “Gnostic Return in Modernity”, “The Heterodox Hegel” y “Theology and the Spaces of Apocaliptic”.
Por su parte, Etsurō Sotoo es un escultor japonés que nació en la ciudad de Fukuoka en 1953. Su trabajo fue la causa de conversión cuando, impresionado por la basílica de la Sagrada Familia en Barcelona, solicitó trabajo en el proyecto inacabado de Antonio Gaudí. Mientras colaboraba en la construcción se convirtió y recibió el Bautismo. En la actualidad las esculturas de Sotoo pueden aprecirarse no solo en la Basílica de Barcelona, sino también en muchos otros puntos de España, Italia y Japón. La calidad de sus obras le convierten además en el primer escultor y en el primer asiático oriental que recibe el Premio Ratzinger.
El Premio Ratzinger
Este galardón busca premiar, como dicen los estatutos de la Fundación Joseph Ratzinger-Benedicto XVI, a los “estudiosos que se hayan distinguido por méritos particulares en la publicación y/o en la investigación científica” y, desde hace unos años, a quienes tienen un impacto en el arte con inspiración cristiana.
Ser católico no es un requisito para obtener el premio, lo cual muestra la apertura del comité científico de la Fundación, compuesto por:
-el cardenal Kurt Koch, prefecto del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos;
-el cardenal Luis Ladaria, prefecto emérito del Dicasterio para la Doctrina de la Fe;
-el cardenal Gianfranco Ravasi, presidente emérito del Consejo Pontificio para la Cultura;
-el arzobispo Salvatore (Rino) Fisichella, pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización;
-el obispo Rudolf Voderholzer, presidente del Instituto Papa Benedicto XVI en Ratisbona.