El Papa Francisco ha presentado a san Pedro y san Pablo como “dos Apóstoles enamorados del Señor, dos columnas de la fe de la Iglesia”, y ha alentado a que “celebremos a Pedro y a Pablo viviendo el seguimiento y anunciando el Evangelio”, en la homilía de la Misa y bendición de los palios para los nuevos arzobispos, celebrada en la solemnidad de san Pedro y san Pablo en la Basílica de San Pedro.
“Es hermoso si crecemos como Iglesia del seguimiento, como Iglesia humilde que nunca da por sentado la búsqueda del Señor. Es hermoso si nos convertimos en una Iglesia en salida, que no encuentra su alegría en las cosas del mundo, sino en anunciar el Evangelio al mundo, para sembrar la pregunta sobre Dios en el corazón de las personas”, ha añadido.
El palio
“Llevar al Señor Jesús a todas partes”, ha animado el Pontífice, “con humildad y alegría: en nuestra ciudad de Roma, en nuestras familias, en las relaciones y en los barrios, en la sociedad civil, en la Iglesia, en la política, en el mundo entero, especialmente allí donde anidan la pobreza, la degradación y la marginación”.
“Y hoy, en el momento en que algunos de nuestros hermanos arzobispos reciben el palio, signo de comunión con la Iglesia de Roma”, ha proseguido el Papa, “quisiera decirles: sean apóstoles como Pedro y Pablo. Sean discípulos en el seguimiento y apóstoles en el anuncio, lleven la belleza del Evangelio a todas partes, junto con todo el Pueblo de Dios”.
Patriarcado ecuménico
El Papa ha dirigido “un afectuoso saludo a la Delegación del Patriarcado ecuménico, enviada hasta aquí de parte de mi querido Hermano Su Santidad Bartolomé. Gracias por su presencia, gracias: avancemos juntos en el seguimiento y el anuncio de la Palabra, creciendo en fraternidad. Que Pedro y Pablo nos acompañen e intercedan por todos nosotros”.
Antes de la oración mariana del Ángelus, Francisco ha subrayado que “Pedro y Pablo eran personas reales, y nosotros, hoy más que nunca, necesitamos personas reales”. Después, ha rogado a la Virgen: “María, Reina de los Apóstoles, ayúdanos a imitar la fortaleza, generosidad y humildad de los santos Pedro y Pablo”.