Vaticano

Cercanía del Papa a Marruecos y aplauso a la familia Ulma beatificada

El Papa Francisco ha manifestado esta mañana en el Ángelus su cercanía y oraciones por los fallecidos y heridos en el terremoto cerca de Marrakech (Marruecos); ha pedido fijarnos en el modelo de la beatificada familia polaca Ulma, exterminada por ayudar a judíos perseguidos en la II Guerra Mundial; y ha rogado por Etiopía y “la martirizada Ucrania, que sufre tanto”.

Francisco Otamendi·10 de septiembre de 2023·Tiempo de lectura: 3 minutos
Papa Francisco

El Papa Francisco saluda a los fieles reunidos en la plaza de san Pedro (CNS photo / Lola Gomez)

En el Ángelus de esta mañana de domingo en la Plaza de San Pedro, el Santo Padre ha mostrado su “cercanía al querido pueblo de Marruecos, afectado por un devastador terremoto”; y ha puesto a la familia polaca Ulma, beatificada hoy en su tierra por el cardenal Semeraro, como “modelo de servicio” para todos.

El Papa ha pedido asimismo por la reconciliación y la fraternidad en el pueblo de Etiopía que celebra el 12 de septiembre el Año nuevo, y por el fin de todas las guerras. Como es habitual, ha rogado en especial por la “martirizada Ucrania, que sufre tanto”.

No a los chismes 

En su reflexión previa a la oración mariana del Ángelus, el Roma Pontífice ha reflexionado sobre la corrección fraterna de la que habla hoy Jesús en el Evangelio, a la que ha calificado como “una de las expresiones más grandes del amor, y también una de las más exigentes”.

Francisco ha subrayado que “los chismes son una plaga en la vida de las personas y de las comunidades, porque traen división, sufrimiento y escándalo, y nunca ayudan a mejorar, nunca ayudan a crecer”.

Al criticar las habladurías, el Papa ha citado a san Bernardo, cuando dijo que “la curiosidad estéril y las palabras superficiales son los primeros peldaños de la escalera de la soberbia, que no conduce hacia lo alto sino hacia abajo, precipitando al hombre a la perdición y a la ruina”.

Por el contrario, Jesús nos enseña a comportarnos de otra manera, ha señalado el Papa. “Esto es lo que nos dice hoy: Si tu hermano comete una falta contra ti, ve y repréndelo, entre tú y él a solas. Háblale cara a cara, lealmente, para ayudarlo a entender en qué se equivoca”.

“Esto no es hablar de él a sus espaldas, sino decirle las cosas a la cara, con mansedumbre y amabilidad”, ha proseguido el Santo Padre. Y si no es suficiente, la ayuda que hay que buscar “no es la del grupito que chismea sino de una o dos personas que quieran realmente ayudar. “Y si sigue sin entender, entonces dice Jesús: involucra a la comunidad”.

“Pero no se trata de poner a la persona en la picota, no; sino de unir los esfuerzos de todos, para ayudarle a cambiar. La comunidad debe hacerle sentir a él o a ella que al tiempo que condena el error está cerca con la oración y el afecto, siempre dispuesta a ofrecer la comprensión y a comenzar de nuevo”, ha añadido el Santo Padre.

“Cerca del pueblo marroquí”

Al comentar el trágico terremoto de Marruecos, el Papa Francisco ha asegurado que reza por los heridos, por los muchos que han perdido la vida, y por sus familiares; agradece a todos los que socorren y ayudan, y a quienes están luchando para aliviar los sufrimientos de la gente. “Espero que la ayuda de todos pueda sostener a la población en este trágico momento. Estamos cerca del pueblo marroquí”, ha manifestado.

Como es conocido, en las últimas horas, al menos 2.000 personas han fallecido en un violento terremoto de magnitud 6,9, desatado en varios departamentos situados cerca de la ciudad marroquí de Marrakech, en la noche del día 8, que ha dejado también 2.050 heridos, más de la mitad graves, según el Ministerio del Interior del país alauita.

Inmediatamente, en un telegrama firmado por el Secretario de Estado cardenal Pietro Parolin, el Papa Francisco expresó su “dolor” y manifestó su cercanía y sus oraciones a las familias que han perdido a sus seres queridos y sus hogares, y animó a los que participan en las tareas de ayuda. 

La Iglesia católica se ha movilizado. Las Conferencias Episcopales italiana y española, entre otras, han manifestado su dolor y solidaridad con todos los afectados. El cardenal Cristóbal López Romero, arzobispo de Rabat, ha expresado su compasión en declaraciones a Vatican News, “especialmente hacia las familias que están de luto y los que han perdido sus casas”, y ha efectuado un llamamiento a todos los católicos para que expresen su solidaridad con el pueblo marroquí. 

“Amor evangélico” de la familia Ulma

“Hoy en Polonia han sido beatificados los mártires Giuseppe y Victoria Ulma, con sus siete hijos, una familia entera exterminada por los nazis el 24 de marzo de 1944, por haber dado refugio a algunos judíos que eran perseguidos. Al odio y a la violencia que caracterizaron ese tiempo respondieron con el amor evangélico”, ha señalado Francisco.

“Esta familia polaca, que representó un rayo de luz en la II Guerra Mundial sea para todos nosotros un modelo en el camino hacia el servicio de quienes pasan necesidad. Un aplauso para esta familia de beatos”, ha rogado el Papa. Omnes ha dedicado algunas informaciones y reportajes en fechas recientes a la historia de la familia Ulma beatificada hoy domingo en Polonia por el cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, quien ha calificado a los Ulma como un ejemplo de santidad de “la puerta de al lado”.

El autorFrancisco Otamendi

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