El presidente de la Comisión Episcopal para las Comunicaciones Sociales, Mons. José Manuel Lorca Planes, y el presidente de la Comisión Episcopal para la Liturgia, Mons. José Leonardo Lemos han compartido un briefing centrado en las orientaciones que ambas comisiones han elaborado, de manera conjunta, para “ayudar y aconsejar” acerca de las retransmisiones de la Eucaristía y otras celebraciones litúrgicas o “paralitúrgicas”, tanto en medios generalistas como a través de las diversas plataformas sociales.
El documento aconseja un cuidado especial de estas retransmisiones para evitar la confusión de los fieles
El presidente de la Comisión Episcopal para la Liturgia ha querido señalar que se trata de “unas pautas de conducta para todos aquellos que acercan las celebraciones a quienes no pueden asistir físicamente”.
Mons. Lemos ha subrayado que “queremos que se tenga en cuenta lo que se ofrece: el Misterio de la redención y a quién se ofrece: a unos destinatarios determinados, especialmente personas enfermas, mayores y cuidadores”.
En este punto, los obispos han vuelto a recordar que seguir la misa a través de los medios de comunicación no sustituye a la asistencia a la misa dominical si no se tiene impedimento grave.
Entren algunas de las orientaciones que se incluyen en este documento, se establece, por ejemplo, que las celebraciones se realicen desde un lugar santo: templo o capilla, y que, tanto el sacerdote celebrante como los acólitos y el pueblo fiel, asistente físicamente, “sean conscientes de que se está retransmitiendo la celebración”.
Lemos ha llamado a que «se cuiden tanto el desarrollo de la liturgia, las lecturas…, etc., como la realización y retransmisión de la celebración. En este sentido, el celebrante “ha de saber que se dirige a la comunidad presente y a la virtual”.
Además, el documento aconseja que, una vez retransmitida la celebración de la eucaristía, se borre el vídeo “para no dar lugar a equivocaciones». La celebración eucarística se vive en comunión espiritual con una comunidad real que se reúne en un determinado tiempo y lugar. «No se ‘guarda’ el vídeo de la Misa para verla después” ha apuntado mons. Lemos, aunque ha puntualizado que ciertos momentos de la celebración de la Santa Misa como la homilía “si pueden quedar grabados como alimento espiritual del pueblo fiel”.
Otro de los consejos es que los sacerdotes que realizan este tipo de retransmisiones lo pongan en conocimiento de la Delegación de Medios episcopal de su obispado correspondiente para que el obispo sea consciente y sepa qué sacerdote y cómo, está retransmitiendo este tipo de celebraciones.
En palabras de Mons. Lemos, “no se trata de controlar ni de coartar sino de ayudar, sobre todo a los sacerdotes que realizan este tipo de retransmisiones para que sean dignas y ayuden tanto al pueblo presente físicamente como al virtual”.
Los obispos responsables de ambas comisiones han destacado que estas orientaciones serán publicadas en la web de la CEE y enviadas a los sacerdotes diocesanos.