Algunas naciones africanas como Kenya, Etiopía o Sudáfrica, han tomado en las últimas semana decisiones políticas responsables, según los observadores, que aportarán una estabilidad necesaria para prevenir enfrentamientos y abordar el crecimiento agrícola.
TEXTO – Rafael Miner
“¡Nuestras oraciones han sido respondidas!”. Los fieles kenianos, felices por el inesperado encuentro entre el presidente y el líder de la oposición. Así tituló hace unos días su crónica desde Nairobi la agencia Fides, de las Obras Misionales Pontificias.
“La reunión entre el presidente Uhuru y el líder de la NASA, Raila Odinga es fruto de la oración por la paz que católicos y otros cristianos han realizado durante la Cuaresma. Creo que el presidente Uhuru y Raila pueden ser figuras simbólicas del comienzo de la curación de la nación”, ha manifestado Misericordia Lanya, fiel católica en la parroquia Umoja de Nairobi.
Otra persona, Eveline Shitabule, de la parroquia de los Santos Ángeles de Lutonyi, de la diócesis de Kakamega, en el oeste de Kenia, ha señalado: “Este es el último milagro que ha tenido lugar en Kenya; hemos orado por la paz en nuestro país y Dios ha respondido a nuestras oraciones”.
Trabajar juntos
A primeros de marzo, el presidente de Kenya, Uhuru Kenyatta, mantuvo por sorpresa una reunión en Nairobi con su rival político, el líder de la Súper Alianza Nacional (NASA), Raila Odinga. Los dos líderes comparecieron juntos ante la nación y declararon su determinación para trabajar juntos con el fin de sanar las heridas y reconciliar a los kenianos.