La declaración, firmada por Mons. Francisco Javier Martínez, arzobispo de Granada y Presidente de la Subcomisión Episcopal para Relaciones Interconfesionales y Diálogo Interreligioso junto a Mons. Néstor Sirotenko, arzobispo de Madrid y Lisboa, perteneciente al Patriarcado de Moscú, hace un llamamiento a «todos aquellos que tienen el poder de detener la violencia y la barbarie a que escuchen en su conciencia la voz de Dios, que rechaza el mal y la guerra, y llama a reconstruir la fraternidad universal». Además señala el compromiso de ambas iglesias de «seguir trabajando por la reconciliación entre los pueblos».
Texto íntegro de la Declaración
Nuestras Iglesias se unen ante el dolor y el sufrimiento provocado a tantos hermanos nuestros ortodoxos, católicos y personas de todas las creencias, por la invasión de Rusia a Ucrania. Desde la segunda guerra mundial, Europa no se ha enfrentado a una catástrofe de tal magnitud, que agrava la ya difícil crisis provocada por la pandemia de Covid-19. En este contexto desolador, nuestras Iglesias quieren recordar juntas las palabras de nuestro Señor Jesucristo, el Príncipe de la Paz: «Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios» (Mt 5,9).
En este tiempo de Cuaresma, en el que nos preparamos para celebrar el triunfo de la Vida sobre la muerte, invitamos a todos nuestros fieles a intensificar la oración por la paz en todo el mundo, especialmente en Ucrania, para que la luz radiante de la Pascua no quede oscurecida por las lágrimas de los que lloran a sus muertos, víctimas de la guerra.
Agradecemos los gestos de caridad hacia las víctimas de la guerra y la acogida generosa a todos los refugiados. La solidaridad con el hermano que sufre es expresión del consuelo y la misericordia del Padre celestial hacia todos sus hijos.
Apelamos a todos aquellos que tienen el poder de detener la violencia y la barbarie a que escuchen en su conciencia la voz de Dios, que rechaza el mal y la guerra, y llama a reconstruir la fraternidad universal.
Mostramos nuestro compromiso para seguir trabajando por la reconciliación entre los pueblos como auténticos pastores que desean ser instrumentos de paz y de comunión.
Madrid, 6 de abril de 2022
Misa por la paz y las víctimas de la guerra y el Covid
Además, el jueves 7 de abril, la Conferencia Episcopal Española se une a la invitación del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE) a celebrar durante cada día de la Cuaresma una Eucaristía por los fallecidos a causa de la pandemia en Europa. Una celebración a la que este año se suma la invocación por la paz y por los fallecidos a causa de la guerra.
La capilla de la Sucesión Apostólica acogerá la celebración eucarística por estas intenciones siguiendo la cadena de oración en la que participan todas las Conferencias Episcopales de Europa, según un calendario previsto.
Oración interreligiosa por la paz
Además de esta declaración, se da la circunstancia de que representantes católicos, evangélicos, judíos y musulmanes se dieron cita en Madrid, convocados por la Federación de Comunidades Judías de España y el Centro de Estudios Judeo Cristiano el martes 5 de abril en un rezo conjunto por la paz en Ucrania y en el mundo.
Coincidiendo con la celebración de las Pascuas judía, cristianas y el Ramadán en el mes de abril, los representantes religiosos explicaron los fundamentos y el sentido de sus respectivas festividades y se unieron en un rezo conjunto por la paz, la armonía y el respeto entre los seres humanos.