José de Acosta (1 de octubre de 1540 – 15 de febrero de 1600) fue un científico y misionero en Hispanoamérica que recibió el apodo de «el Plinio del Nuevo Mundo». Fue ordenado jesuita de joven y, cuando contaba 31 años de edad, lo destinaron a los Andes. Allí fundó varios colegios, entre ellos los de Panamá, Arequipa, Potosí, Chuquisaca y La Paz. Después ocupó la cátedra de teología en la Universidad de San Marcos en Lima y también fue elegido provincial de la Compañía en Perú en 1576.
Lo mismo se le menciona supervisando la fundición de una gran campana como investigando las mareas de los estrechos en vista del posible ataque del inglés Francis Drake. También dirigió la elaboración del Catecismo y el Breviario Trilingües (español, aimará y quechua). Además, realizó al menos tres largos viajes por el interior del Perú en los que visitó las misiones allí establecidas, lo que le permitió un conocer la naturaleza y vida social de los indígenas.
De sus contribuciones científicas se pueden destacar dos. La primera es descubrir la corriente oceánica de Humboldt, al oriente del océano Pacífico junto a Sudamérica (250 años antes que el científico prusiano Alexander von Humboldt).
La segunda se relaciona con la evolución. En 1590 publicó “Historia Natural y Moral de las Indias”, donde se tratan las cosas notables del Cielo, elementos, metales, plantas y animales; y los ritos, ceremonias, leyes y gobierno y guerras de los indios. Allí postula una interpretación tímida pero evolutiva de la realidad animal, vegetal y cultural. Para él todos los animales de América no serían otra cosa que una modificación de los originales de Europa, donde la diferencia en distintos caracteres de los animales pudo ser causada por diversos accidentes. Por este motivo se le cita en varios libros de historia de la ciencia como fundador de la Biogeografía, consistente en el estudio de la distribución geográfica de los seres vivos sobre la Tierra a lo largo de los miles de millones de años de evolución. Sus aportaciones audaces hicieron que anticipase a Alexander von Humboldt (que lo cita profusamente) y a Charles Darwin (que copia lo que dice Humboldt) en algunas ideas sobre la distribución y migraciones de los seres vivos en América hispana desde hace millones de años.
Catedrático de paleontología. Facultad de Teología de Granada.