La sede de la universidad privada ESIC acogió el martes 16 de mayo de 2023 el Foro Omnes sobre el tema “Arquitectura sagrada en el siglo XXI”. La mesa, moderada por don Alfonso Riobó, director de Omnes, estuvo formada por los arquitectos Felipe Samarán, Ignacio Vicens y Emilio Delgado, y el sacerdote Jesús Higueras, párroco de Santa María de Caná.
El encuentro, patrocinado por la empresa constructora Cabbsa, contó también con la colaboración del banco Sabadell y la fundación CARF.
Asistieron al evento Jorge Beltrán, presidente de Cabbsa, Paloma Tejero, viceconsejera de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, y Luis Alberto Rosales, director de la fundación CARF, entre otros.
Recuperar la belleza
Comenzó las intervenciones don Jesús Higueras, párroco de Santa María de Caná, que señaló que, a la hora de construir una iglesia, se debe tener en cuenta la importancia de que ese espacio conecte con la trascendencia.
Al mismo tiempo, indicó que la iglesia no se reduce solo al templo, sino que también tiene que cubrir otras necesidades relacionadas con su función evangelizadora, no solo celebrativa, como, por ejemplo, disponer de salas para la catequesis. Asimismo, don Jesús subrayó que los motivos económicos no pueden llevar a renunciar a la belleza, e hizo una invitación a recuperar la belleza en la construcción de las iglesias.
La evolución de la arquitectura sacra
A continuación, intervino Felipe Samarán, que contextualizó el hecho de que la iglesia es un lugar donde los asistentes se preguntan por el sentido de la vida y una serie de cuestiones trascendentales, lo cual debe tenerse en cuenta a la hora de proyectarla. “¿Cómo se hace convivir el mensaje eterno de aquello que nos ha sido dado con un envoltorio necesariamente caduco?”, se preguntó.
También ha explicado que Cristo nunca habló de liturgia ni de arquitectura, y esta ha tenido una evolución a lo largo de los siglos, pero sin perder de vista lo fundamental.
En lo que nos afecta de manera más cercana, planteó el ejemplo del Concilio Vaticano II: “El altar pasaba a ser una relación dialógica entre el oficiante de la Eucaristía y el pueblo de Dios que estaba asistiendo a ella, frente a lo que pasaba antes, que era una relación entre todos ellos mirando en una misma dirección. (…) Esa relación que se establece, ahora nueva, es diferente a la que había en la Iglesia que nos precedió”. Sobre la dificultad que entraña diseñar arquitectónicamente una iglesia ha afirmado que “la única solución es tener una perspectiva cristocéntrica y objetiva de lo que estamos haciendo”.
Los templos de hoy representan nuestro tiempo
En tercer lugar, realizó su ponencia Emilio Delgado, que subrayó la importancia de la responsabilidad profesional, ya que, cuando le encargan una iglesia, “el arquitecto tiene que hacer un lugar para rendir culto a Dios”. Ha explicado que “el templo hace referencia a un origen”, “convoca toda la historia”, desde el Antiguo Testamento hasta el Nuevo, y además “es el lugar donde nos preguntamos de dónde venimos y a dónde vamos”. Por último, ha explicado que los santuarios representan a la humanidad a lo largo de la historia y que “los templos de hoy nos representan a nosotros”.
Conocer la liturgia
El último ponente, Ignacio Vicens, inició el debate respondiendo a una de las preguntas planteadas por don Jesús Higueras al principio del acto: ¿el arquitecto debe atender a la sensibilidad de los fieles o a la belleza y excelencia? “La excelencia es lo único que se puede ofrecer a Dios. La sensibilidad de los fieles es perfectamente irrelevante a la hora de hablar de arte sacro o arquitectura sacra”, ha respondido.
También ha señalado que el tema económico no es nunca un problema para la arquitectura, indicando que la mejor arquitectura en España del siglo XX fue en los años 50, cuando se disponía de pocos medios económicos y materiales. Por otra parte, ha aseverado que para poder proyectar correctamente un templo es imprescindible estudiar qué quiere la Iglesia, es decir, dominar la liturgia. “O dominas perfectamente la liturgia, o te equivocarás”, ha asegurado.
Finalizado el coloquio, los asistentes han podido formular sus preguntas a la mesa. En el número de junio de la revista contaremos con un apartado amplio dedicado a este evento.