La fundación ‘The Family Watch’ ha publicado el estudio “Análisis de las películas y series más vistas por jóvenes de la Generación Z (nacidos entre 1995 y 2009), en plataformas de suscripción bajo demanda» (SvOD) en 2023. El informe cuenta con el apoyo de investigadores de la Universidad Complutense, Rey Juan Carlos, Antonio de Nebrija y Europea de Madrid.
La mayoría son jóvenes consumidores audiovisuales de 16 a 29 años, audiencia objeto de este estudio. El análisis de esta generación es clave, ya que son los primeros nativos digitales, lo que supone que el estudio de su comportamiento actual en el mundo audiovisual, es especialmente interesante para comprender las futuras tendencias en la industria de contenidos, explican los expertos.
Mercado en fuerte crecimiento
En España, los ingresos de los servicios de vídeo en línea superaron los 700 millones de euros en 2023, y en Europa los servicios a la carta SVoD se han triplicado pasando de 5.300 millones de euros en 2017 a 16.200 millones de euros en 2021. En consecuencia, la cuota de los servicios a la carta en los ingresos audiovisuales totales aumentó del 5 al 13 %.
Las plataformas de streaming, como Netflix, Amazon Prime Video o HBO Max, son el segundo canal de consumo de contenidos para el 93,5% de usuarios de la Generación Z después de las redes sociales. Netflix es la plataforma audiovisual en línea de pago preferida en cuatro de cada diez hogares, seguida de Amazon Prime Video, señala el informe. Los jóvenes pasaron, en el último trimestre de 2023, dos horas diarias en plataformas de servicios bajo demanda.
Generación de la impaciencia y de modo individual
La gran mayoría de los jóvenes reconocen que consumen las series y películas a través del smartphone (7 de cada 10), a continuación lo hacen en Smart TV. Se trata de una denominada “generación de la impaciencia”, que quiere consumir de la manera más cómoda posible y con la mayor brevedad, de ahí que quieran ver series y películas de una menor duración.
Es importante analizar, según los expertos, que ·el formato de visualización suele ser de manera individual, lo que cambia el concepto de “ver en familia”, para convertirse en un ejercicio de individualismo”.
Papel de padres y madres
Así mismo, “el papel de los padres y de las madres como principales educadores de sus hijos, adquiere aún más importancia, puesto que deben tratar de fomentar que los productos audiovisuales se sigan visualizando en conjunto, ya que esto servirá para mejor la comunicación en la familia y escuchar a los adolescentes y jóvenes de la casa”.
De los 50 personajes analizados, el 38 % no se conoce cómo es su relación con sus familias, mientras que la familia biparental con hijos es la más representada (18 %), seguida de la familia reconstruida (10 %) y la familia numerosa (10 %).
Resulta sorprendente, según el think thank, que “las referencias a las familias sean apenas inexistentes en los productos más consumidos por los jóvenes, y en el caso de que aparezcan relaciones familiares, sea de forma negativa, para justificar traumas en la actualidad”.
Sin embargo,” en las series se promueve el respeto y las relaciones familiares como vía para compartir problemas. La amistad y el amor están por encima de las relaciones familiares”.
Imágenes distorsionadas
Gema López, profesora en la Universidad Europea, considera que “la adolescencia es una edad muy delicada en la que los jóvenes construyen su autoestima y autoimagen. Si los adolescentes que aparecen en las series están interpretados por actores adultos ya desarrollados, los jóvenes espectadores pueden tener una imagen distorsionada de lo que es un cuerpo adolescente. Eso puede fomentar la aparición de complejos».
Rafael Carrasco, profesor e investigador en redes en la Universidad Complutense de Madrid: señala por su parte que “llama la atención que en la red social X los comentarios sobre series y películas españolas se refieren a los intérpretes, mientras en las americanas se usa el nombre de los personajes”.
“Uso y abuso de pantallas por menores y jóvenes”
A Cristina Gallego, profesora e investigadora en la Universidad Rey Juan Carlos, le preocupa la aparición de “un alto consumo de alcohol mezclado con una conducción temeraria normalizada, lo que lleva a preguntarse si refleja a los jóvenes españoles o les influye”.
Carmen LLovet, investigadora de Innomedia en la Universidad Nebrija, opina que “debería llevar a reflexión que los jóvenes en España elijan ver series que no les representan ni en edad, ni en situación socioeconómica, como si las series fueran la nueva estrategia aspiracional”.
Finalmente, María José Olesti, directora general de The Family Watch, ha comentado que “Las familias llevan ya algunos años mostrando, especialmente a través de nuestro Barómetro, su especial preocupación ante el uso y el abuso de las pantallas por parte de los menores y jóvenes, por cómo gestionan su imagen y como se sexualiza ésta, especialmente en las niñas, y también en cómo puede afectar todo ello en las relaciones personales y familiares y en el desarrollo psicoafectivo, en el aprendizaje y en la instauración de hábitos de vida saludables».
Algunas recomendaciones
Entre las principales recomendaciones del informe de la consultora familiar, y de los especialistas, se encuentran “fomentar el pensamiento crítico de los menores”; “que el criterio de elección de una serie o película no sólo esté basado en la edad recomendada por parte de las plataformas”; “mantener el diálogo con los hijos ante los hechos de ficción que se le representan”; cuando “se vean contenidos con hijos más pequeños, poner en valor lo positivo y dejar ver las cosas negativas”; “ y con los adolescentes/preadolescentes, ayudarles a cuestionarlo todo, enfatizando no sólo lo que es mejor para ellos, sino la importancia de llegar a la verdad, siempre desde la libertad”.