El Servicio de Asistencia Religiosa a las Fuerzas Armadas españolas (SARFAS) ha cumplido 25 años. El Seminario castrense celebró también el 18 de abril sus cinco lustros de vida. El arzobispo castrense, Mons. Juan del Río, explica la específica tarea de su arzobispado para garantizar la asistencia religiosa a militares, policías y sus familias.
— Enrique Carlier
En el contexto de los 25 años del SARFAS y del Seminario castrense, el 16 de abril tuvo lugar en el arzobispado castrense un emotivo encuentro al que acudieron los rectores, formadores y sacerdotes que han pasado por el Seminario castrense a lo largo de sus veinticinco años de existencia. En el encuentro se rindió homenaje al cardenal José Manuel Estepa Llaurens, quien erigió el seminario castrense y fue también uno de los redactores de la Constitución apostólica Spirituali militum curae.
Esta Constitución, que regula la atención espiritual a los militares a través de los ordinariatos castrenses, fue firmada por san Juan Pablo II el 21 de abril de 1986.
El 17 de abril, y coincidiendo con la Jornada mundial de oración por las vocaciones, Mons. del Río presidió la ordenación de un nuevo presbítero castrense.
Sobre el SARFAS, el seminario castrense y la peculiar tarea pastoral que lleva a cabo el arzobispado castrense, conversamos con quien está a la cabeza de esta circunscripción eclesiástica: Mons. Juan del Río. Nos recibe en su despacho de la calle del Nuncio, donde destaca una imagen no pequeña de la Macarena que apunta el pasado hispalense del arzobispo, confirmado luego al oír su nítido acento andaluz.
¿Qué es exactamente el SARFAS?
Se trata del Servicio de Asistencia Religiosa a las Fuerzas Armadas. Se estableció por el Real Decreto 1145, de 7 de septiembre de 1990, y desarrolla el acuerdo entre la Santa Sede y el Estado Español sobre asistencia religiosa a las Fuerzas Armadas del 3 de enero de 1979.
El arzobispado castrense presta la parte de este servicio que asiste religiosa y espiritualmente a los miembros católicos de las Fuerzas Armadas y de la Policía.
¿Qué novedad ha traído el SARFAS con respecto a la configuración del antiguo cuerpo eclesiástico del ejército?
—El SARFAS es fruto de un paso importante que se dio en 1990 cuando los antiguos capellanes del cuerpo eclesiástico, que tenían entonces condición militar, pasaron a una nueva configuración. En ella se acentúan más los aspectos pastorales del capellán castrense y de la presencia de la Iglesia católica en las Fuerzas Armadas.