¿Sabemos situar a Jeremías en la historia, cuándo vivió, por qué escribió lo que leemos hoy? ¿De quién era contemporáneo el rey David? Preguntas como estas fueron las que llevaron a Jesús Gil y Jose Ángel Domínguez a unir sus conocimientos de diseño gráfico, Teología espiritual y Teología bíblica en El pórtico de la Biblia, que, rememorando el Pórtico de la Gloria que da acceso a la catedral de Santiago de Compostela, se concibe como una “puerta de entrada” al conocimiento y profundización en los libros que componen el Antiguo y el Nuevo Testamento.
Jesús Gil, sacerdote de la Prelatura del Opus Dei y doctor en Teología Espiritual por la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, que había trabajado anteriormente en diversos medios como como periodista visual y director de arte, explica cómo nació este libro de consulta: “tanto Jose Ángel, que es doctor en Teología Bíblica, como yo, habíamos dado clases anteriormente sobre historia y geografía de la Tierra Santa. Teníamos los mapas del Oxford Bible Atlas, la cronología hecha, procedente del Saxum Visitor Center y habíamos trabajado acerca del tema. Durante el confinamiento empecé a considerar la posibilidad de pedir los derechos de estos mapas a Oxford y empezamos a elaborar lo que sería la base de este libro. Trazamos un plan con la Fundación Saxum -con la que yo ya había publicado Huellas de nuestra fe– una guía de Tierra Santa-, y gracias a ella, fue posible realizar este proyecto”.
El apoyo de la Saxum International Foundation es lo que ha hecho posible que El pórtico de la Biblia sea un libro de consulta puesto a disposición de todo aquel que quiera utilizarlo. Se puede descargar gratuitamente y está concebido como un apoyo a la enseñanza y estudio de la Biblia en todos los niveles. “El origen es muy académico, muy didáctico” destaca Jesús Gil. “Queríamos hacer unos materiales buenos para dar esas clases sobre la Biblia y ponerlos a disposición de todo el mundo, algo que no habría sido posible en una editorial convencional y que ha sido posible gracias a la Saxum International Foundation”.
Además de su trabajo previo y el apoyo de la Fundación, los autores de El pórtico de la Biblia han contado con el asesoramiento y orientación de varios profesores de Teología Bíblica e Historia de la Universidad San Dámaso de Madrid (Napoleón Ferrández y Agustín Giménez), la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia (Joaquín Mestre), la Universidad de Navarra (Francisco Varo, Vicente Balaguer y Fernando Milán) y la Pontificia Università della Santa Croce de Roma (Carlo Pioppi).
El pórtico de la Biblia está disponible en castellano. La versión inglesa y polaca de los textos se encuentran ya en sus últimas fases, y se están preparando las ediciones en portugués e italiano. En este sentido, Jesús Gil puntualiza: “Ojalá vengan muchas más ediciones, como las de Huellas de nuestra Fe que, además de las anteriores, está editado en francés, alemán y coreano”.
Situar la historia de la salvación
¿Qué aporta para cualquier cristiano este libro? Jesús Gil lo señala claramente: “Situar la historia de la salvación en el tiempo y en el espacio”.
Un hecho que no es baladí, ya que, como destaca Gil, “esto tiene de fondo toda la teología de la Encarnación: Dios se ha hecho hombre en un momento concreto de la historia, en un lugar preciso del mundo y no en ningún otro”.
Para el cristiano que se acerca a la Biblia como parte del conocimiento de Cristo, “conocer la historia y los lugares donde se desarrolla nuestra historia de la salvación son fundamentales”.
Acercarse a la Sagrada Escritura
“Con Jesús nos encontramos también en su Palabra”, recuerda Jesús Gil. Por esta razón, entender qué y por qué la Sagrada Escritura dice ciertas cosas, habla de unos reyes o unas zonas o hace mención a tradiciones de diversas procedencias puede resultar de gran ayuda para entender en mayor amplitud el mensaje de esos pasajes del Antiguo y Nuevo Testamento.
Son muchos los cristianos que, realmente, desconocen la Biblia. Históricamente, además, ha existido una especie de reparo ante la dificultad de lectura de algunos libros como reconoce el propio Jesús Gil: “Es cierto que hay libros y pasajes dentro de la Sagrada Escritura que no son fáciles de entender y de interpretar hoy en día, pero tienen enseñanzas también para el hombre y la mujer de hoy. Cada mes doy una catequesis de confirmación de adultos y, en muchas ocasiones, pregunto como de qué época era el rey David… Nadie sabe contestar que es del año 1000 antes de Cristo. Este dato no es indiferente porque, cuando David decide construir el templo, Dios le envía a Natán para confirmarle en la bondad de su propósito y decirle además que sus manos están manchadas de sangre y que, lo construirá su hijo Salomón. Pero además, Natán ya le hace la profecía mesiánica: “Tu casa y tu reino se mantendrán siempre firmes ante mí, tu trono durará para siempre” (2Samuel 7, 16-17) y esta profecía tarda mil años en cumplirse, lo que nos da a entender que los tiempos de Dios no son nuestros tiempos”. Otro ejemplo que apunta el autor es el de conocer la historia del pueblo de Israel. Por ejemplo, en relación a la tierra prometida, dada por Dios, se constata que va de un fracaso tras otro: deportaciones, guerras, esclavitud… “Toda la historia de fracasos, de destierros, infidelidades, idas y venidas… también nos dice mucho a nosotros, porque nuestra vida esta llena de lo mismo”, apunta Jesús Gil. “Ninguna vida es perfecta y, sin embargo, a partir de los fracasos, Dios va hablando y purificando a su pueblo”.
Una de las novedades más importantes de El pórtico de la Biblia son las fichas de cada libro que compone la Sagrada Escritura. En este caso, los libros no se presentan en el orden canónico sino cronológico-temporal, con el objetivo de ayudar a encuadrar el momento de la Escritura o al que se refieren los libros bíblicos en el contexto de la historia universal. Estos gráficos explicativos de cada uno de los libros que forman el Antiguo y el Nuevo Testamento son gráficos sintéticos y de carácter divulgativo.
Para cada libro se detalla su género literario, la historia narrada o su contexto histórico, la época y proceso de composición, la autoría, las enseñanzas principales, conceptos clave, aspectos relevantes de la estructura y pasajes centrales.
Los gráficos van acompañados de unas ilustraciones de National Geographic Magazine y de datos sobre los manuscritos más antiguos que se conservan para cada libro, también recopilados por la revista norteamericana.
Como señala Jesús Gil, esta elección del orden cronológico no ha resultado fácil. “Algunos libros de la Biblia son sencillos de encuadrar, pero otros no. Es prácticamente imposible ordenarlos exactamente. Encontramos libros como Isaías, que fue escrito a lo largo de cientos de años, o Daniel, del que se desconoce fecha. En El pórtico de la Biblia estos libros están situados en el lugar en el que mejor puede entenderse su mensaje”.
La labor de documentación para llevar a cabo este libro ha sido extensa. Jesús Gil destaca, por ejemplo, la valiosa ayuda del libro de Vicente Balaguer Introducción a la Sagrada Escritura, en el que explica cómo la redacción del libro del Génesis corresponde al tiempo del destierro en Babilonia. “El Génesis se escribe en contraposición a los mitos babilónicos”, recuerda Jesús Gil. “El pueblo de Israel es el único pueblo monoteísta en medio de una sociedad politeísta, en la se que explica el mundo como consecuencia de enfrentamientos entre dioses… Los judíos niegan esa explicación y acuden a su tradición oral: la de la creación del mundo por un Dios único, bueno, que lo crea por amor… Conocer cuándo se escribe cada uno de estos libros da unas claves de lectura que hacen entender mejor el contenido de cada libro”.
El libro, además, es el resultado de un enorme trabajo de coordinación y adecuación entre el diseño y el contenido. Cada libro se presenta en una o dos páginas, incluyendo las fichas explicativas. Además, las cronologías incluidas recorren la historia de la salvación desde Abrahán hasta el presente, con información de contexto histórico de otras civilizaciones cercanas a Israel o de la historia universal.
Una invitación a leer la Biblia
Con El pórtico de la Biblia los autores quieren realizar una “invitación a leer cada libro de la Biblia”. Está concebido como un libro de consulta.
“Este libro no se agota en sí mismo, sino que debe llevar a leer otros libros, por ejemplo libros de la Biblia, o introducciones a la lectura de libros bíblicos”, señala Jesús Gil que, además de la citada Introducción a la Sagrada Escritura apunta la utilidad de los comentarios de la Sagrada Biblia de EUNSA, realizados por los profesores de Teología de la Universidad de Navarra.
El pórtico de la Biblia puede ayudar a sacar el jugo a las lecturas de cada domingo apunta Jesús Gil. De hecho, uno de los objetivos de este libro es servir de ayuda en la predicación dominical para los sacerdotes o en las catequesis. “Muchas veces ocurre que, en el pasaje del Antiguo Testamento del domingo no conocemos el contexto. Por ejemplo, cuando se lee parte del oráculo de consuelo de Jeremías, que se encuentra casi al final de su libro, se lee sin conocer qué ha ocurrido antes. Jeremías es testigo de la destrucción de Israel, de la deportación a Babilonia… consecuencia de unos males que él mismo había denunciado. Por eso, que el propio Jeremías, al final del libro, tenga unos oráculos de consuelo y restauración del reino de Israel le da mucho más valor, porque durante todo su libro va denunciando los pecados y males del pueblo y advirtiendo de un mal, de la destrucción, pero acaba con el consuelo. Al conocer esto se le da más valor a ese consuelo”.
Conocer mejor la Sagrada Escritura para conocer mejor a Dios, este sería el objetivo clave de El pórtico de la Biblia ya que, a lo largo de la Biblia, “Dios se da a conocer y da a conocer como actúa. Si desconocemos la Sagrada Escritura desconocemos una gran parte de la historia de Dios con nosotros”, concluye Gil.
La Fundación Saxum y el Visitor Center
El pórtico de la Biblia se une, en cierto modo, a otro libro, Huellas de nuestra fe, como una preparación a la visita a Tierra Santa por parte del peregrino. Ambos títulos han sido editados por la Saxum International Foundation, que tiene como objetivo principal ofrecer la posibilidad de llegar a un encuentro con Dios mediante un conocimiento más profundo e histórico de los lugares en los que Jesús vivió, predicó y actuó. Su proyecto principal es el Saxum Visitor Center situado a 15 kilómetros de Jerusalén y que ofrece, en su entrada, una cronología que aúna la historia de la salvación con hechos históricos principales, así como un gran mapa de Oriente Medio sitúa al peregrino en la historia de los lugares que está visitando. En el interior, se ofrece una experiencia interactiva y multimedia a través de la que los peregrinos se hacen una perfecta idea de cómo serían la vida y los principales acontecimientos de la historia de la salvación.