Su reflexión se ha producido con ocasión de la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2023, que la Iglesia celebra el próximo domingo día 24, en un fin de semana en el que el Papa Francisco se desplaza precisamente a Marsella, en la clausura de los ‘Encuentros del Mediterráneo”, como viene informando Omnes.
Xavier Gómez OP ha precisado que se ha referido al desarrollo de África “por la vecindad, pero la reflexión se refiere también a otros continentes, todo está interconectado”. A su juicio, “el fenómeno migratorio es uno de los fenómenos que definen nuestro cambio de época, por todas las conexiones que tienen lugar en torno a las migraciones, y a la manera de gestionarlas y abordarlas”.
“La Iglesia lleva desde que es Iglesia trabajando la hospitalidad y reconociéndose con el migrante”, ha subrayado, “porque la Iglesia católica es diversa culturalmente desde sus inicios. La Iglesia nunca se pone de lado en relación a los migrantes. siempre está al lado de los migrantes y refugiados”, ha añadido Xavier Gómez, “porque la Iglesia lleva la hospitalidad en su ADN”.
Codificar el derecho a no migrar
En su comparecencia, el responsable de migraciones de la Conferencia ha estado acompañado por David Melián, abogado canario que trabaja en la delegación de migraciones de la diócesis de Canarias. Este jurista ha sido abogado de migrantes en Canarias, y luego ha visitado a sus familias, por ejemplo en Senegal, por lo que su perspectiva es sumamente enriquecedora.
Tanto Xavier Gómez OP como David Melián han señalado que “el derecho a no migrar no está codificado y no existe como tal, y esto es importante. La Iglesia dice por qué no codificarlo en la legislación internacional, para proteger y dar más derechos para que la gente pueda desarrollar dignamente su vida en sus países de origen”.
En cuanto a Senegal, “la elección no es libre. Vienen porque no tienen más remedio”, ha apuntado David Melián. “La necesidad de que en los países de origen se promuevan las condiciones para que las personas puedan tomar una decisión libre es muy importante”.
“Las cifras son importantes –en Canarias ahora mismo, llamativas–, pero detrás de estas cifras hay personas. Creo que lo más importante, como decía antes José Gabriel Vera (director de Información de la CEE, presente en el acto), es hablar de las personas, y no tanto de las cifras. Aunque sólo fuera una persona, ya tiene la dignidad a la que se refería Xavier. Aportar cifras lo que hace es deshumanizar. Si nos hablan sólo de números, no nos tofa el corazón, no nos mueve”.
Guía Atlántica de Hospitalidad
Xavier Gómez ha informado que su departamento “está preparando a nivel internacional e interdiocesano la Guía Atlántica de Hospitalidad, con países y diócesis del sur de Europa, de España, en concreto de Canarias, algunas diócesis del sur de España, Ceuta y Melilla, y otras del África noroccidental, Marruecos, Senegal, Mauritania, y otros países, apuntado una visión de futuro para responder al desafío de las migraciones”. Un proyecto en colaboración con el Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede.
Además, “tenemos los corredores de hospitalidad, en los que hay una solidaridad entre diócesis en las islas Canarias y con la península, con el fin de promover la cultura de la hospitalidad y la solidaridad interdiocesana para facilitar la movilidad de migrantes en situación de vulnerabilidad e interpelar a las Administraciones públicas para que asuman su responsabilidad en este ámbito”.
“Y luego tenemos la Mesa del mundo rural”, ha añadido, “que lee de manera positiva las oportunidades de trabajo y la necesidad que hay en la España vaciada, apostamos por conectar las familias que quieren vivir en los pueblos con los municipios y las entidades que están promoviendo la revitalización de los pueblos. Se contribuye así a revitalizar los pueblos, pequeñas comunidades cristianas y asegurar proyecto dee arraigo de estas familia
“Derecho a migrar en dignidad”
Al mismo nivel que el derecho a no migrar, “la Iglesia reconoce, aboga y promueve el derecho a migrar en dignidad, no de cualquier manera”, agrega Xavier Gómez. “Propone vías seguras y legales para la migración, acogida digna y segura, operaciones conjuntas de rescate y de búsqueda, porque la migración se encuentra muy expuesta y conocemos el drama de los que se dejan la vida en el mar, asumamos el deber que tienen los Estados de rescatar a las personas, y hacerlo de manera conjunta. Y buscar a las personas que se pierden, incluso los cuerpos que el mar se traga”
Y luego, “cuando hablamos de la llegada, la Iglesia va a estar abogando, como dice el Papa en ‘Fratelli tutti’, por el reconocimiento a todos los migrantes, desplazados y refugiados, del derecho a la ciudadanía plena, concepto importante, que asegura ese reconocimiento de derechos. Y como se hizo con los desplazados ucranianos, cuando se activa de una manera eficaz, otorga el permiso de trabajo, el de residencia, y evita quedar en una situación administrativa irregular”.
“No puede ser que la respuesta para disuadir a las personas de migrar sea infringirles sufrimiento, esa carrera de obstáculos que les ponemos. La campaña de este año no pierde de vista todo lo que tiene que ver con la movilidad humana: los países de origen, el tránsito y la llegada”, señala el responsable de migraciones de la CEE.