La gran estrella de cristal corona la nueva torre dedicada a la Virgen María, que mide 138 metros y tiene 800 ventanas y con ella se culmina al completo la primera torre de la basílica de la Sagrada Familia de Gaudí en Barcelona.
La estrella, iluminada por dentro durante la noche, pesa 5,5 toneladas y tiene 7,5 metros de diámetro.