Miguel Angel Martín Cárdaba es doctor en Comunicación y licenciado en Filosofía. Su experiencia con jóvenes le hizo darse cuenta de que el amor se ha romantizado tanto que, de cara al matrimonio, muchos tienen unas falsas expectativas que les llevan a fracasar en su relación.
Con el objetivo de ayudar a las personas a tener éxito, ha publicado “Por qué otros van a fracasar en el amor… pero tú no”, un libro que es una “dosis de realidad” para todo el que lo lea. Los primeros capítulos parecerán pesimistas a todos aquellos románticos a los que les encanta el amor de Hollywood, pero cuando uno acaba el libro descubre que su autor en realidad cree en el amor, pero en el amor de verdad.
En esta entrevista con Omnes, Miguel Ángel Martín Cárdaba habla sobre las falsas expectativas en el matrimonio, la diferencia entre enamoramiento y amor, y las razones por las que ha escrito este libro.
Por qué otros van a fracasar en el amor… pero tú no
Su libro podría parecer un poco pesimista de primeras a pesar del título. Ofrece estudios científicos sobre las razones por las que “se acaba el amor” y no oculta la alta tasa de fracasos en las relaciones, ¿por qué eligió precisamente ese modo de contar las cosas?
– Creo que lo primero que hay que hacer para no fracasar en algo es tener una expectativa correcta. La fórmula más garantizada para fracasar es no conocer los peligros y dificultades. Lo que yo quería con el libro era dibujar un mapa en el que se puedan ver tanto el tesoro como los peligros del camino.
¿Cree entonces que los románticos, con sus expectativas en el amor, pueden tener matrimonios exitosos?
– Esta nueva generación romántica tiene que cambiar un poco la perspectiva y me gustaría que mi libro funcionase como una vacuna o antídoto frente a una visión “romanticista” y sentimental del amor. Esa es una visión que, en mi opinión, te incapacita para triunfar.
¿Por qué hemos romantizado tanto el amor que hemos perdido de vista la realidad del matrimonio?
– Inicialmente el matrimonio no se entendía como una relación en la que lo más importante es el sentimiento, eso llega con el Romanticismo, época en la que enamoramiento y amor se identifican, confundiendo así a muchas generaciones posteriores. En el libro yo intento separar estos dos conceptos, que unidos confunden pero por separado nos pueden enriquecer.
¿Qué diferencia hay entre enamoramiento y amor?
– El enamoramiento es la parte más dramática y apta para una historia. Todas las historias románticas que consumimos hoy no son realmente historias de amor, sino historias de enamoramiento. Las historias de amor reales empiezan cuando la película acaba. La parte del amor es más prosaica, más del día a día y menos entretenida de contar, a pesar de que es fascinante vivirla.
El sentimiento y el amor están muy relacionados, y el sentimiento forma parte de la experiencia amorosa. Muchos actos de amor están provocados por sentimientos y hay sentimientos que desembocan en actos de amor, pero son cosas distintas.
El enamoramiento es pasivo, es algo que ocurre. Sin embargo, el amor es activo, es una decisión. Tú puedes decidir amar a otro, sacrificarte por la otra persona, buscar su bien por encima del tuyo, sin basarte en tus sentimientos. El enamoramiento es egoísta y fácil, pero el amor es entregado y esforzado. Por otro lado, el sentimiento cambia, mientras que el amor, como acto de la voluntad, es duradero.
Es cierto que el enamoramiento es una parte muy bonita y mágica, pero la verdadera concepción del amor es aún más mágica.
El inicio del libro es desalentador, porque ofrece muchas cifras y resultados de estudios que pueden romper mucho la imagen bonita que tenemos del matrimonio. ¿Cómo anima al lector a seguir con el libro para llegar a lo que ofrece al final?
– La primera parte del libro es una “dosis de realidad” y puede resultar difícil de tolerar para algunos. Por eso, al principio del todo pongo un aviso asegurando que yo creo en el amor. El mensaje del libro en general es esperanzador y la segunda parte del libro es incluso optimista, pero primero hay que desmontar las ideas engañosas que son bonitas de creer pero te ponen muy difícil el éxito en el matrimonio.
Pienso en el libro como una medicina. El sabor no gusta, pero viene bien tomarla y cuando miras atrás incluso agradeces que alguien te diera esa “dosis de realidad”.
En el libro expone casos desgarradores de parejas que se rompen, ¿a qué se debe que tantas personas no tengan éxito en el amor?
– El sentimiento inicial de enamoramiento no puede aguantar de forma infinita. El sentimiento va desapareciendo pero la clave es entender que ese enamoramiento no es amor. Cuando el sentimiento no acompaña hay que esforzarse y eso es clave para tener éxito en una relación.
Después del análisis que ha realizado, ¿nos puede dar una definición de matrimonio?
– El matrimonio es una relación de entrega mutua que se construye. Si bien la compatibilidad entre las partes es aconsejable, los que llevan 50 años casados te dicen que la compatibilidad no es un requisito, sino una consecuencia de amarse.
El amor no son dos piezas de puzzle que encajan, sino dos realidades que se funden hasta hacerse una única realidad. En el matrimonio dos personas se entregan para construir algo juntos, hacer feliz al otro y, como consecuencia, ellos mismos son felices.