Lo mejor para el final. Hoy, miércoles 15 de septiembre, es el día de la peregrinación tradicional nacional al santuario de Šaštín, donde se venera la patrona de Eslovaquia: la Virgen de los Siete Dolores. La particularidad de la peregrinación de este año es que uno de los peregrinos ha sido el mismo Papa Francisco. El Santo Padre ha celebrado por la mañana la Santa Misa al aire libre, tras presidir un encuentro de oración con los obispos en el interior del santuario.
La ciudad
Šaštín es una ciudad con una larga fama en la historia de Eslovaquia. Su historia se remonta a la llegada de los santos Cirilo y Metodio a la antigua patria de los eslovacos. Era una importante fortaleza para la protección de las rutas comerciales en el cruce de las carreteras del Danubio, Bohemia y Znojmo. El nombre del castillo y del asentamiento proviene de las palabras «Šášie» y «Tín», que significa: castillo de los árboles cortados. Se construyó junto al río Myjava, en un terreno pantanoso. El castillo era la sede de los gobernadores del condado y del arcedianato, representantes del obispo. El arcedianato de Šaštín administraba los diaconos desde Moravský Ján hasta Čachtice. Así, Šaštín fue siempre la sede del deán y del arcediano, que residían en el castillo. La primera iglesia, la capilla del castillo, probablemente se encontraba allí. La primera mención escrita es de 1204, cuando Imrich II dio a la familia Győr una propiedad llamada «Sassin». Más tarde, la propiedad fue adquirida por Imrich Czobor I. Su hijo Imrich Czobor II se estableció aquí de forma permanente.
La peregrinación
La tradición de la peregrinación a Šaštín está estrechamente ligada a la veneración mariana. Angelika Bakičová, la esposa del conde Imrich Czobor, solía rezar por su esposo ante una imagen de la Virgen María que colgaba de un árbol cerca del castillo. En agradecimiento a su conversión, mandó elaborar en 1564 una imagen de Nuestra Señora de los Siete Dolores. El pueblo veneraba mucho a esta Virgen y rezaba a la nueva imagen para que curara su cuerpo y su alma. Tras examinar 726 casos milagrosos, la estatua fue declarada milagrosa en 1732 por una comisión investigadora establecida por el obispo de Esztergom. En 1762, la estatua fue trasladada solemnemente al altar mayor de la Basílica. La emperatriz María Teresa participó en la ceremonia como partidaria de la construcción de la propia basílica. En 1927, el Papa Pío XI proclamó a la Virgen de los Siete Dolores como patrona de Eslovaquia.
La Basílica
En 1733, la Orden Paulina (Orden de San Pablo, primer ermitaño) llegó a Šaštín y se comprometió a construir una iglesia de peregrinación y un monasterio. La construcción comenzó en 1736 con la bendición de la primera piedra. En 1748 se terminó el edificio y el tejado de la parte de la iglesia, y tres años más tarde se cubrió también el monasterio. En 1786, el monasterio paulino fue suprimido por orden del emperador José II, y los monjes se marcharon a Polonia. Tanto la iglesia como el monasterio quedaron bajo la administración de los sacerdotes diocesanos.
A partir de 1924, la Orden Salesiana estuvo presente en Šaštín, y estuvo activa hasta 1950, cuando fue expulsada por la fuerza. En 1964, el Papa Pablo VI elevó el Santuario de la Virgen María de los Siete Dolores a la categoría de Basílica Menor. Los salesianos regresaron a Šaštín durante un breve periodo en 1968-1970 y luego durante un periodo más largo tras el cambio de régimen político en 1990. En el monasterio dirigieron un instituto católico (gymnázium) para chicos hasta 2016. En 2017, los salesianos fueron sustituidos de nuevo por los administradores originales: los paulinos.
En la actualidad
Las visitas más significativas de los peregrinos modernos fueron las de la Madre Teresa de Calcuta (1987) y el Santo Padre san Juan Pablo II, que rezó en la Basílica durante su segunda visita pastoral a Eslovaquia (1995). Actualmente, Šaštín acoge cada año unas 200 peregrinaciones nacionales y 40 extranjeras (además de los creyentes de los países vecinos, los de España y México no son una excepción). En total, hay cerca de 200.000 peregrinos al año, de los cuales unos 40.000 se dan cita durante la principal peregrinación nacional. La fiesta de la Virgen de los Siete Dolores el 15 de septiembre es también fiesta nacional en Eslovaquia.
Además de la peregrinación nacional y de la peregrinación de los greco-católicos, en Šaštín son tradicionales las peregrinaciones temáticas: la peregrinación de los enamorados, la peregrinación de los hombres, la peregrinación de las madres, la peregrinación de los ministros, la peregrinación de los motociclistas y la peregrinación de los corazones rotos, entre otras.
Francisco en Šaštín
El Papa ha insistido durante la homilía en no reducir la vida cristiana: «No olvidemos esto: la fe no puede reducirse a una azúcar que endulza la vida. No se puede. Jesús es un signo de contradicción. Vino a traer luz donde hay oscuridad, sacando la oscuridad a la luz y obligándola a rendirse. Por eso las tinieblas siempre luchan contra Él. Quien acepta a Cristo y se abre a él se levanta; quien lo rechaza se cierra en las tinieblas y se arruina».
Han sido más de 50.000 personas las que han acudido a Šaštín para celebrar la solemnidad de Nuestra Señora de los Siete Dolores, patrona de Eslovaquia, en la Santa Misa con el Papa Francisco hoy. Ha sido el broche de oro, que el Papa ha presidido al final de un viaje pastoral de cuatro días importantísimo en Eslovaquia. Tras la misa, tiene lugar la ceremonia de despedida en el aeropuerto y volará a Roma.
Una conexión entre Eslovaquia y Argentina
En este último día de la visita del Santo Padre a Eslovaquia, se dará un arco espiritual entre Eslovaquia y Argentina: se trata de la celebración eucarística por la Santa Patrona de Eslovaquia, Nuestra Señora de los Siete Dolores en el Santuario Nacional en la Basílica de la Virgen de Luján en Argentina, el país natal del Papa Francisco. Esta iniciativa ha sido impulsada por el Embajador de Eslovaquia en Argentina, S. E. Rastislav Hindický; y la Misa la celebrará el padre Lucas García, Rector de la Basílica de Luján.
La celebración tendrá lugar a las 11.00 horas en el mismo día que el Papa Francisco está celebrando la misa en el Santuario Nacional de Eslovaquia en la Basílica de Šaštín. Después de la misa pronunciará unas palabras el Embajador de Eslovaquia, quien también ofrecerá la ofrenda floral con los colores de Eslovaquia a la imagen de la Nuestra Señora de los Siete Dolores expuesta en la Cripta de la Basílica. La imagen de la Santa Patrona de Eslovaquia se encuentra en su capilla en la cripta de la Basílica de Luján, donde fue inaugurada en noviembre de 1996, ya hace 25 años.