Con la novedad de una lectora en idioma chino, la primera vez que sucede en una Audiencia en el Vaticano, el Papa Francisco ha manifestado este miércoles que “hoy, con gran placer, iniciamos la lectura del resumen de la catequesis en chino”.
“Deseo, por tanto, dirigir un cordial saludo a los chinos aquí presentes y a los que están conectados a través de los medios de comunicación. Sobre todos vosotros y sobre vuestras familias invoco la alegría y la paz. Que Dios os bendiga”, ha señalado el Pontífice.
Las palabras de la lectora en idioma chino han sido incluidas en quinto lugar, tras los idiomas francés, inglés. alemán y español, y antes del portugués, árabe, polaco e italiano, con el que suele terminar el Papa.
Núcleo del Evangelio
Antes de la lectora en chino, que como el resto de lectores ha leído un fragmento de la Carta de san Pablo a los Corintios, el Santo Padre ha recordado el mensaje central de la predicación evangelizadora: “Después de Pascua, la palabra ‘Evangelio’ adquiere el nuevo significado de buena noticia sobre Jesús, es decir, el Misterio Pascual de la muerte y resurrección de Cristo. Esto es lo que el apóstol llama ‘evangelio’ cuando escribe: ‘o me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para la salvación de todo el que cree’ (Rom 1:16)”.
El Pontífice ha subrayado que “en la predicación cristiana hay dos elementos constitutivos: el contenido, que es el Evangelio; y el medio, que es el Espíritu Santo. Los dos van íntimamente unidos; es decir, la Palabra de Dios se transmite con la unción del Espíritu Santo; sin el Espíritu faltaría el alma, la vida de la predicación, sólo se difundirían ideas o preceptos a cumplir”.
Primer anuncio, que siempre hay que volver a escuchar
Más adelante, ha añadido que “en la catequesis tiene un rol fundamental el primer anuncio o ‘kerygma’, que debe ocupar el centro de la actividad evangelizadora y de todo intento de renovación eclesial. […] Cuando a este primer anuncio se le llama ‘primero’, eso no significa que está al comienzo y después se olvida o se reemplaza por otros contenidos que lo superan. Es el primero en un sentido cualitativo, porque es el anuncio principal, ese que siempre hay que volver a escuchar de diversas maneras”.
Oración y predicar a Jesús
Ahora bien, “podríamos preguntarnos: si la acción evangelizadora depende del Espíritu Santo, ¿podemos hacer algo también nosotros? ¿Cómo es posible colaborar en la acción evangelizadora de la Iglesia?”. Y el Papa ha respondido: con “la oración”, y “estar
atentos para no predicarnos a nosotros mismos sino a Jesús. Esto significa que, antes de afrontar un apostolado, necesitamos rezar, invocar al Espíritu Santo para que nos asista. Y esa misión tiene que estar centrada en Cristo, no en nuestros propios deseos o necesidades”.
Predicación breve
En este punto, Francisco ha insistido en que la predicación no debe tener 8 minutos, luego diría 10, entre otros motivos porque porque solemos ver a los hombres que salen fuera a fumar un cigarro durante la homilía. Y la predicación debe tener “una idea, un afecto y una propuesta”, ha señalado.
Virgen Inmaculada y apoyo de Polonia a ucranianos
En su saludo a los peregrinos de lengua española, el Papa ha manifestado que “estamos celebrando en estos días la Novena en preparación a la Solemnidad de la Inmaculada Concepción. Pidámosle a María nuestra Madre que, como ella, permanezcamos abiertos y disponibles a la acción del Espíritu Santo en nuestra vida y en la misión que la Iglesia nos encomienda. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los proteja”.
Lo remarcaría también el saludo final en lengua italiana: “El tiempo de Adviento, que acaba de comenzar, nos presenta en estos días el ejemplo luminoso de la Virgen Inmaculada. Que Ella os estimule en vuestro camino de adhesión a Cristo y sostenga vuestra esperanza”.
Luego, al dirigirse a los peregrinos de lengua polaca, ha recordado que “el próximo domingo celebraremos en Polonia la XXV Jornada de Oración y Ayuda Material a la Iglesia de Oriente. Doy las gracias a todos los que apoyan con oración y ofrendas a la Iglesia en esos territorios, especialmente en la Ucrania devastada por la guerra.¡Os bendigo de corazón!”.
Criterios de evangelización, y la paz.
Antes de dar la Bendición, el Pontífice ha considerado que “no querer predicarnos a nosotros mismos implica también no dar siempre prioridad a las iniciativas pastorales promovidas por nosotros y vinculadas a nuestro propio nombre, sino colaborar de buen grado, si se nos pide, en las iniciativas comunitarias, o que se nos encomienden por obediencia. ¡Que el Espíritu Santo enseñe a la Esposa a predicar así el Evangelio a los hombres y mujeres de hoy!”.
Por último, el Papa ha reiterado que recemos por la paz, su llamamiento habitual desde hace tiempo. “La guerra es una derrota humana, destruye, recemos por los países en guerra, ¡hay tantos niños inocentes que sufren!”.