La sucesión de comunicados, afirmaciones y acusaciones que, desde hace varios días, se han publicado a raíz de la filtración de una denuncia contra el que fuera Arzobispo de Lima durante dos décadas, deja, además de la evidente necesidad de seguir luchando contra esta realidad, la importancia de una gestión transparente por parte de la Iglesia en estos dolorosos casos.
A continuación, se presenta una cronología detallada de los diferentes comunicados que se han sucedido en la última semana.
Sábado, 25 de enero de 2025
Publicación de las acusaciones
El diario El País informa que, en 2019, el Papa Francisco apartó al cardenal Juan Luis Cipriani, exarzobispo de Lima y miembro del Opus Dei, tras ser acusado de abuso sexual a un menor en 1983. La víctima, que actualmente tiene 58 años, y que desea permanecer en el anonimato, afirma que los hechos ocurrieron cuando tenía 16 o 17 años en un centro del Opus Dei en Lima y consistieron en determinados tocamientos.
Carta del cardenal Cipriani
Pocas horas después, Cipriani publica una carta negando categóricamente los hechos y asegurando que nunca ha cometido abuso sexual alguno. Muestra su pesar por la filtración de una información tan delicada y reitera su unidad con el Papa Francisco.
En su carta, señala que no se le entregó la denuncia presentada contra él y no se abrió ningún proceso en su contra, aunque la Congregación de la Doctrina de la Fe le impuso como sanciones vivir fuera de Perú y limitar su actividad ministerial. También añade que, en una audiencia con el Papa Francisco en febrero de 2020, se le permitió reanudar parte de su actividad sacerdotal (predicación de retiros, celebración pública de sacramentos, etc).
Comunicado del Opus Dei en Perú
El mismo día, el vicario regional del Opus Dei en Perú publica un comunicado en el que pide perdón por no haberse reunido con el denunciante de Cipriani cuando éste le pidió audiencia en 2018.
Explica que, al estar siendo Cipriani investigado por el Vaticano, él no tenía competencia jurídica en el caso y prefirió no interferir en el proceso para no causar una injerencia inoportuna. Sin embargo, reconoce que podría haberle ofrecido su apoyo personal y espiritual
También aclara que no hay registro de un proceso formal contra Cipriani mientras el cardenal estuvo incardinado en la prelatura. El ahora vicario regional apunta que en aquellos años no existían protocolos tan rigurosos como los actuales, lo que pudo permitir que existieran denuncias que quedaran sin registro.
Destaca que, en la actualidad,cualquier acusación sigue un procedimiento claro y no se limita a conversaciones privadas. Reafirma su compromiso con la prevención, la mejora en la gestión de denuncias y la solidaridad con las víctimas de abuso.
Domingo, 26 de enero de 2025
Pronunciamiento del Vaticano
Preguntado por algunos medios de comunicación, el portavoz del Vaticano confirma que, en 2019, se impusieron medidas disciplinarias al cardenal Cipriani debido a las acusaciones de pederastia. Estas medidas incluían su retiro, residencia fuera de Perú, prohibición de realizar declaraciones públicas y el uso de símbolos cardenalicios.
Asegura también que las sanciones seguían en vigor, algo especialmente relevante porque Cipriani había recibido el 7 de enero de 2025 un importante reconocimiento civil, la medalla al mérito más importante de la ciudad de Lima.
Martes, 28 de enero de 2025
Comunicado del arzobispo de Lima
El arzobispo de Lima, Carlos Castillo, emite un comunicado de apoyo a las víctimas de pederastia y a los periodistas que denuncian estos casos. Critica con dureza a quienes niegan la verdad y rechazan las decisiones de la Santa Sede, instándolos a la conversión y al abandono de justificaciones.
No cita explícitamente a Cipriani, pero su mensaje fue entendido como un posicionamiento sobre el caso, teniendo en cuenta el contexto de la polémica suscitada.
Comunicado de prensa de la Conferencia Episcopal Peruana
La Conferencia Episcopal expresa su pesar por las noticias sobre el cardenal Cipriani y lamenta el sufrimiento de la víctima y la comunidad eclesial. Los obispos peruanos valoran la decisión del Papa Francisco, destacando la combinación de justicia y misericordia en las medidas impuestas y llaman a la oración por el denunciante, por Cipriani y por la Iglesia, para que sea un espacio seguro y de reconciliación.
Miércoles, 29 de enero de 2025
Carta de Cipriani al presidente de la Conferencia Episcopal Peruana
Tras las diversas manifestaciones en torno a este tema, el cardenal Cipriani escribe una carta a sus hermanos en el episcopado peruanos. En ella reitera su inocencia y sostiene que firmó las restricciones impuestas por el Vaticano en 2019, declarando en el mismo acto que la acusación era falsa y que obedecía por amor a la Iglesia. Insistió en que aceptó las medidas preventivas mientras se esclarecía la verdad, aunque asegura no haber podido defenderse.
En esta misiva, quien fuera arzobispo de Lima durante dos décadas, muestra su sorpresa porque el episcopado peruano no haya respetado su presunción de inocencia ante las acusaciones y reitera su comunión con el Papa y su fidelidad a la Iglesia.
Cuestiones jurídicas y procesales
El llamado caso Cipriani ha planteado diversas cuestiones desde que, hace menos de una semana, y de manera completamente sorpresiva, saliera a la luz. Las dudas, expresadas desde diversos medios e instituciones comienzan con el hecho de que el cardenal fuera sancionado en 2019 sin haber tenido un proceso jurídico claro.
A día de hoy, el Vaticano no ha desmentido ni que el cardenal peruano no tuviera acceso a la denuncia, ni las condiciones bajo las que Cipriani asegura que firmó las restricciones impuestas. Asimismo, hay quien ha señalado la “casualidad” de que la filtración de este caso se produjera en un momento en el que miles de comunicadores se reunían en Roma con motivo del Jubileo de los Comunicadores, con acceso a la Sala Stampa vaticana, que no suele pronunciarse en festivos.
Si bien, el hecho de la demanda y las medidas disciplinarias por parte del Vaticano queda confirmada por ambas partes, da la impresión de que no ha habido una investigación formal de los hechos, ni un proceso jurídico normalizado del caso, a pesar de que fue en 2019 cuando el proceso canónico de esta índole queda clarificado por Vos estis lux mundi. Una serie de cuestiones que dificulta la comprensión de este proceso que, en estos momentos continúa despertando interrogantes.