El Ángelus de hoy ha tenido temas bastantes distintos. En su comentario al evangelio del día el Papa Francisco ha subrayado la importancia de la humildad. No debemos creernos superiores a los demás ni ser autorreferenciales. Para glosar esta idea el Pontífice ha hecho referencia a un sacerdote que hablaba tanto de sí mismo que sus fieles decían que se auto incensaba continuamente.
Glosando la parábola del publicano y el pecador que suben a rezar al templo, ha animado a los fieles a aplicarla cada uno a sí mismo, comprobando “si en nosotros, como en el fariseo, existe ´la íntima presunción de ser justos` que nos lleva a despreciar a los demás. Sucede, por ejemplo, cuando buscamos cumplidos y enumeramos siempre nuestros méritos y buenas obras, cuando nos preocupamos por aparentar en lugar de ser, cuando nos dejamos atrapar por el narcisismo y el exhibicionismo. Vigilamos el narcisismo y el exhibicionismo, basados en la vanagloria, que nos llevan a los cristianos, a los sacerdotes, a los obispos a tener siempre en los labios la palabra ´yo`: ´Hice esto, escribí esto, lo escribí. Dije, yo lo entendió`, y así sucesivamente. Donde hay demasiado yo, hay poco Dios”.
Jornada del Domund
El Papa también ha recordado que en el día de hoy “se celebra la Jornada Mundial de las Misiones, que tiene como lema ´Seréis testigos de mí`. Es una ocasión importante para despertar en todos los bautizados el deseo de participar en la misión universal de la Iglesia, mediante el testimonio y el anuncio del Evangelio. Animo a todos a apoyar a los misioneros con la oración y la solidaridad concreta, para que puedan continuar la obra de evangelización y promoción humana en todo el mundo”.
JMJ en Lisboa
La anécdota simpática de la mañana ha llegado cuando Francisco ha animado a dos jóvenes portugueses a salir junto a él al balcón y se ha inscrito él mismo en la JMJ de 2023 a través de una tableta. A continuación, ha invitado a los jóvenes a sumarse “a este encuentro en el que, tras un largo período de ausencia, redescubriremos la alegría del abrazo fraterno entre los pueblos y entre las generaciones, ¡que tanto necesitamos!”
Beatificaciones en España
Por último, también se ha referido a la beatificación que tuvo lugar ayer en Madrid, que elevó a los altares a Vincenzo Nicasio y once compañeros de la Congregación del Santísimo Redentor, asesinados durante la Guerra Civil española. “El ejemplo de estos testigos de Cristo, hasta el derramamiento de sangre, nos empuja a ser consecuentes y valientes; su intercesión sostiene a los que hoy luchan por sembrar el Evangelio en el mundo”.